El 'Sport' consuma su mudanza fuera de Barcelona

No son momentos fáciles para el periodismo deportivo. Las grandes cabeceras cada vez están perdiendo más fuerza ante el nacimiento de varios proyectos digitales, que se sitúan como las plataformas del futuro. Las ventas de diarios en papel cada vez son más exiguas, y para mayor infortunio, llegó la pandemia, que comportó un golpe tremendo en cuanto a ingresos por patrocinio. 

El Grupo Zeta, que entre muchos medios cuenta con el diario Sport y El Periódico, ha sido otro de los que no ha podido esquivar el duro golpe que está recibiendo el periodismo deportivo. Como demuestra el hecho de que en breve se consumirá su mudanza fuera de Barcelona, por primera vez desde su fundación a finales de la década de 1970. 

Imagen de archivo de la redacción del diario 'Sport' / Linkedin

Imagen de archivo de la redacción del diario 'Sport' / Linkedin

Hasta este 2021, Zeta ocupaba un edificio alquilado a la familia Asensio, antigua propietaria del grupo de comunicación, por el que paga un alquiler elevado. Ahora, su nuevo emplazamiento será Hospitalet de Llobregat. En concreto, en un edificio muy cerca de Gran Vía 2, donde hace días que se está instalando las nuevas redacciones. 

Disconformidad entre los empleados

Esta decisión, a la espera de conocer el ahorro que implica para la empresa, no ha generado entusiasmo entre la plantilla, que en declaraciones a Dirconfidencial, han criticado la "difícil accesibilidad al nuevo puesto de trabajo" y que incluso es un lugar "poco aconsejable" para salir de trabajar de noche..

Por el momento, hay que destacar que gran parte de la plantilla se encuentra teletrabajando. Y tras esta mudanza, muchos esperan que esta modalidad se acabe aplicando de forma definitiva, al menos de forma parcial. En el comunicado interno, la empresa defendió que el nuevo espacio, construido en 2012, “brinda un mejor aprovechamiento espacial para el desarrollo de nuestras diferentes actividades". 

Los trabajadores del Grupo Zeta, en una manifestación / EFE

Los trabajadores del Grupo Zeta, en una manifestación / EFE

Con esta mudanza, Zeta romperá el último vínculo que mantenía con el apellido de su fundador, Antonio Asensio. Hace casi dos años fue vendida a Prensa Ibérica, que se impuso en la puja a Mediapro. El grupo mantiene una situación económica precaria que ha derivado en cierres de cabeceras y en los últimos meses ha estado sometido a cambios institucionales, como el relevo de Anna Cristeto tras solo un año al frente de El Periódico y la asunción de su sustituto Albert Sáez de la dirección simultánea en Sport.