España inició con discreción su camino hacia la Eurocopa. El combinado nacional no pudo pasar del empate a 0 ante la Portugal de Cristiano Ronaldo, vigente campeona continental. Tuvo la posesión y las ocasiones, pero fue incapaz de plasmar su dominio en el juego en el electrónico del Wanda Metropolitano.
El feudo del Atlético de Madrid acogió 15.000 espectadores en sus gradas. Los aficionados espolearon a la selección, pero paralelamente no dudaron en cuestionar y criticar las decisiones del seleccionador, Luis Enrique, ni de los jugadores. Álvaro Morata y Cristiano Ronaldo fueron dos de los grandes damnificados.
Pitos para Luis Enrique
El técnico asturiano fue recibido con pitos antes del encuentro ante la selección de Portugal. Y es que la convocatoria del ex del FC Barcelona para la Eurocopa suscitó muchas críticas. Las ausencias de Sergio Ramos, Iago Aspas, Sergio Canales y Nacho Fernández, entre otros, no gustaron a la afición.
Luis Enrique contra Portugal / EFE
Morata, por su parte, fue abucheado tras estrellar el balón en el larguero cuando estaba completamente solo. La grada no se contuvo y cantó "Morata qué malo eres, Morata qué malo eres". Luis Enrique, que había lamentado la oportunidad, afeó los cánticos y dio ánimos al jugador de la Juventus.
Cristiano Ronaldo también se llevó una bronca antes del partido. Pero no todo fueron pitos y abucheos. Unai Simón, que apunta a ser titular en la Eurocopa, fue ovacionado cuando saltó al verde del Wanda Metropolitano para calentar. Pepe también recibió los aplausos de la grada cuando salió sustituido en el 59'.
Las palabras de Luis Enrique
Luis Enrique habló de lo sucedido en las gradas del feudo del Atlético de Madrid después del partido. En cuanto a los pitos que le dedicaron a él, espetó que "los pitos a mí hasta me ponen, pero no me gusta que piten a los jugadores".
Morata contra Portugal / EFE
Entrando más concretamente en el caso de Morata, el preparador asturiano aseveró que "se ha matado a presionar, ha generado mucho peligro. Es para levantarse y ponerse a aplaudir. Después de correr cuarenta metros y engañar al portero, tuvo la mala suerte de que el disparo se estrellara en el larguero. Es para levantarse, aplaudir y romperse las manos".
Dejando de lado los abucheos, Luis Enrique se mostró satisfecho por lo visto en el duelo con Portugal: "Lo que más me ha gustado ha sido la actitud y el compromiso de todos. Muchas cosas positivas sobre aspectos del juego que buscamos. Lo que menos, el resultado".