El FC Barcelona de Sarunas Jasikevicius sigue cuesta abajo y sin frenos. El equipo azulgrana ofreció una versión muy pobre y cayó ante el Joventut de Badalona (72-63) en el segundo partido de los cuartos de final de la Liga ACB. Los culés, que cuentan con la mejor y más cara plantilla de la competición, se lo jugarán todo a una carta el próximo sábado en el Palau.
Aunque logró vencer a la Penya el pasado martes (84-74), la realidad es que el Barça sigue tocado por la derrota en la final de la Euroliga del pasado domingo contra Efes. El cuadro catalán tuvo a tocar el tercer campeonato europeo de su historia, pero Larkin y Micic despertaron a los culés del sueño.
Inicio desastroso
El conjunto azulgrana salió dormido a la pista de un Olímpic que pudo acoger 1.000 personas en sus gradas por primera vez esta temporada. La presencia de público dio fuerza al equipo verdinegro, que empezó el partido con varias marchas más. Tras los primeros cinco minutos, el Joventut vencía por 14-3 comandado por un gran Ferran Bassas.
Tomic con Brandon Davies / EFE
El resultado llegó a ser todavía más abultado (20-5), pero el FC Barcelona acabó reaccionando al final del primer cuarto. Leandro Bolmaro, que se marchará a la NBA cuando concluya el curso, maquilló la imagen de los culés. Después de diez minutos, el marcador reflejaba un 23-13 que, sin ser positivo, no era tan catastrófico como podría haber sido.
Los de Jasikevicius dieron un paso adelante en el segundo cuarto. Incrementaron la intensidad en defensa, lo que provocó que la Penya anotara únicamente un punto en seis minutos. Pero los catalanes seguían sin estar acertados en ataque. Davies situó a los suyos a tan solo un punto (25-24), pero los badaloneses se volvieron a distanciar en la recta final de la primera mitad (31-27).
No hubo manera
Tras el descanso, el FC Barcelona no aprovechó la inercia relativamente positiva con la que había acabado el segundo cuarto. El conjunto culé fue a remolque en el marcador durante toda la segunda mitad y, sin perderle la cara al partido, tampoco llegó a ponerse por delante en el marcador.
Hanga ante la Penya / EFE
El Barça llegó al último cuarto perdiendo 49-44. Se mantuvo cerca en todo momento, pero si llegó a tener alguna opción de dar la vuelta al electrónico, Ribas y Bassas la dinamitaron en la recta final. Por parte culé, Higgins era el único que intentaba que el equipo azulgrana siguiera vivo en el partido.
Al final, 72-63 y la eliminatoria se va al tercer partido. El Barça de Jasikevicius se lo jugará todo a una carta. Si gana, pasará a semifinales. Si no, quedará eliminado de forma prematura. La única noticia positiva de la derrota del equipo azulgrana es que el Palau volverá a tener público más de un año después.