La plantilla del Barça está viviendo una auténtica maldición con las rodillas en los últimos años. Una articulación que los servicios médicos del club tratan con mucha cautela, y más teniendo en cuenta el reciente y peligroso antecedente de Samuel Umtiti. En 2018, el francés optó por un tratamiento conservador tras lesionarse en el menisco rodilla izquierda. Una decisión de no pasar por el quirófano que siempre ha mantenido, y que le ha provocado hasta siete recaídas y un estado de forma más que discutible.
Especialmente controvertidos están siendo los problemas en el menisco de esta articulación. Hasta dos futbolistas este curso han sufrido graves problemas en esta zona. El caso más notorio es el de Ansu Fati, que ya ha sido intervenido hasta en cuatro ocasiones de su rodilla izquierda. Por su edad, se intentó un tratamiento conservador, pero al no reaccionar favorablemente a este, finalmente se optó por extraerle parte del menisco. Lesionado el pasado mes de noviembre, espera estar al 100% en la próxima pretemporada, y que esta operación no tenga secuelas a largo plazo.
Ansu Fati, tras lesionarse contra el Betis | EFE
Meses después, fue Philippe Coutinho el que también pasó por quirófano. Sufrió una lesión en el menisco externo de la rodilla izquierda a finales de diciembre. Los tres meses de baja se han alargado más de los previsto después de ser intervenido en Brasil por tercera vez. No estará este verano con su selección y su futuro en el Barça es toda una incógnita. Contratiempos que han aumentado la desconfianza de algunos futbolistas con los servicios médicos.
Eto'o, ejemplo de superación
Tras tantos meses en el dique seco, posiblemente el pesimismo se haya adueñado de los dos futbolistas. No obstante, la realidad es que existen ejemplos en el Barça de que, tras una correcto periodo de rehabilitación, tienen opciones de regresar a los terrenos de juego sin ningún tipo de consecuencias físicas.
El caso más palpable es el de Samuel Eto'o. El legendario delantero camerunés sufrió en 2007 su primera lesión grave como profesional. En un Werder Bremen-Barça, sufrió una rotura del menisco externo de la pierna derecha. Un contratiempo que le tuvo hasta cinco meses en el dique seco.
Eto'o, tras lesionarse con el Barça / EFE
El atacante blaugrana, que tenía 26 años en ese momento, no solo se recuperó perfectamente, sino que esa misma temporada volvió a demostrar un nivel excelso, finalizando como segundo máximo goleador en una temporada en que los culés no consiguieron alzar ningún título.
Pese a esta seria lesión, Eto'o jugó hasta 10 años más a nivel profesional, en equipos como Inter de Milán, Everton o finamente en Turquía. Un ejemplo perfecto de que Ansu Fati tiene todavía una larga carrera por delante, y que Coutinho podrá regresar al más alto nivel. Eso sí, siguiendo siempre las recomendaciones de los servicios médicos y con un tratamiento regular especial para su rodilla.