El pasado domingo, saltaron todas las alarmas respecto al futuro de Leo Messi. Tras muchas semanas de incógnitas, el padre y representante del 10 blaugrana, Jorge, fue pillado por sorpresa en las gradas del Johan Cruyff. Las primera informaciones apuntaban a que su viaje a Barcelona podría deberse a una posible cumbre con Laporta para tratar el futuro de su hijo. Nada más lejos de la realidad. Esta reunión no se ha producido todavía, ni está agendada.
El verdadero motivo por el que estuvo en el encuentro del filial, fue para ver al extremo norteamericano del filial Konrad de la Fuente. Y es que el canterano está representado por el hermano del capitán culé, Rodrigo, que el pasado mes de enero firmó un acuerdo de colaboración con la agencia comercial y creativa KIN Partners.
Jorge Messi en el Johan Cruyff / REDES
No pudieron escoger mejor partido para verle: el extremo rompió su sequía goleadora y volvió a marcar con el Barça B en el choque contra el Villarreal. El futuro del joven futbolista es una completa incógnita. Tiene ofertas para salir, y por el momento no ha conseguido convencer a Koeman ni hacerse con un hueco en el primer equipo. Ante el overbooking de atacantes, no se descarta una venta con opción de recompra o una cesión.
Konrad de la Fuente, celebrando un gol con el Barça B | FCB
Asimismo, hay que destacar que uno de los accionistas de KIN Partners es significativo: David Beckham, propietario del Inter Miami. Hecho que refuerza todavía más los planes de futuro de los Messi de ir a vivir y jugar unos años en Miami.
La familia Messi gana peso en el vestuario del Barça
Asimismo, la decisión de representar a Konrad de la Fuente refuerza todavía más el peso de la familia Messi en el vestuario del Barça. Se acercaron al estadounidense, precisamente poco después de que este empezase a entrenar regularmente con el primer equipo. Ahora, su futuro está lleno de incertidumbre.
Leo Messi, con su padre, Jorge, y su hermano Rodrigo | EFE
Hay que recordar que Rodrigo Messi ya trató de mantener la representación de Ansu Fati, con el que trabajaron hasta el pasado mes de agosto. Entonces, el atacante de Guinea-Bisáu optó por romper con la familia Messi y pasar a trabajar con Jorge Mendes, el agente de Cristiano Ronaldo.