En el FC Barcelona ya siguen de cerca la progresión del joven centrocampista Nico González, hijo del mítico Fran que deslumbró en el Deportivo de la Coruña durante los años 90. El canterano es uno de los futbolistas más ilusionantes que ha sacado La Masía en los últimos años, y es por eso que ya trabajan para no dejarle escapar.
Según avanzó el programa Què t'hi Jugues de SER Catalunya, garantizar su futuro en el club es una de las prioridades de la nueva junta de Laporta. En este sentido, Mateu Alemany, nuevo director de fútbol del club azulgrana; y Ramon Planes, secretario técnico, ya han tenido reuniones con su entorno más directo para renovar su contrato, que finaliza este próximo mes de junio.
El Barça lo considera el relevo a corto plazo de Sergio Busquets en la medular. Y es por eso que el club blaugrana ha ofrecido al internacional con las categorías inferiores de España ya formar parte de la pretemporada con el primer equipo este mismo verano. Según su rendimiento, podría ser un habitual el curso que viene con los mayores.
Fijo en el Barça B
Y es que este curso, Nico ha demostrado que la Segunda División B se le queda pequeña. Pese a tener todavía edad de juvenil (19 años), se ha convertido en una pieza indispensable para García Pimienta, con 20 partidos disputados. En la posición donde más ha brillado ha sido precisamente la de mediocentro defensivo. Pese a que su velocidad lo lastra para jugar como interior, su corpulencia e inteligencia lo convierten en el jugador perfecto para dominar en esa posición.
González ha pasado por prácticamente todas las categorías del fútbol formativo blaugrana (Alevín hasta Barça B), y siempre jugando con futbolistas mayores que él. Lo que le ha permitido estar siempre exigido y mejorar todavía más un estilo de juego que se basa en la buena lectura, la colocación y ver siempre el fútbol de cara.
Nico González, en un partido con el Barça B | FCB
Nico González, en un partido con el Barça B | FCB
Su potencial es innegable. Y a esto hay que sumar su evidente sentimiento culé. De niño, prefirió la Masía al Real Madrid; y ya en edad de adolescente, siguió en el Barça pese a los cantos de sirena del Manchester City. Koeman ya lo ha visto en directo y le ha impresionado. Con 19 años, apunta maneras. Y el próximo curso, ya tendrá la oportunidad de demostrar su calidad y luchar por un puesto en el primer equipo.