Eder Sarabia fue uno de los protagonistas inesperados del FC Barcelona la pasada temporada. Mientras Quique Setién trataba de guardar un perfil bajo, más comedido de lo habitual ante la prensa, el preparador vasco no dudó en exhibir su carácter, lo que generó cierta polémica en encuentros como el clásico del Santiago Bernabéu.

La relación de Sarabia (y Setién) con el vestuario no era la más óptima. Imágenes como las de Balaídos, con Messi ignorando al entonces segundo entrenador culé, quedaron en la retina de los aficionados. Sarabia Leo no acabaron de congeniar y así lo admitió el técnico del Andorra en una entrevista concedida a El País.

Falta de química

El preparador vasco señaló que "ser Leo Messi es dificilísimo. Eres el mejor jugador de todos los tiempos, conocidísimo. No puedes salir a la calle, te cierras en tu grupo de amigos y familiares. No tienes otro tipo de relaciones, ni puedes contrastar opiniones con otros. Todo eso produce un cansancio y desgaste mental, por eso se quiso ir".

Eder Sarabia y Leo Messi en el partido contra el Espanyol / EFE

Eder Sarabia y Leo Messi en el partido contra el Espanyol / EFE

Sarabia admitió que "no fuimos capaces de tocar las teclas para sacar lo mejor de él. La química no fue la deseada. No encontramos al mejor Messi en el estado anímico. Él debe estar más limpio para desarrollar su fútbol. Al principio tuve buenísimas conversaciones futbolísticas con él. Es un ganador, solo hay que hablarle de fútbol, darle dos o tres mensajes para ganar".

El técnico, asimismo, considera que "se dio demasiada dimensión a lo del Bernabéu. Cuando los resultados no se dan, se saca punta a todo. Unos intentan desestabilizar a otros". Sobre su relación con el vestuario, apuntó que "cuando fiché por el Andorra, varios jugadores me mandaron mensajes para felicitarme. No creo que haya dejado enemigos en el Barça".

Su salida del Barça

Preguntado por si salió quemado del club azulgrana, Sarabia señaló que "al contrario. En otro momento de mi carrera posiblemente me hubiera afectado más. Para mi juventud llegué con cierta madurez. Me quedo con todo lo bueno que me pasó. Soy de los que me desgasto poco en lo que no puede controlar. Soy del Athletic desde niño, pero el Barça era y es mi otro equipo".

Quique Setién con Sarabia y Junior Firpo en un partido de Champions League, en la temporada 2019/2020 / FC Barcelona

Quique Setién con Sarabia y Junior Firpo en el Barça-Nápoles de Champions League / FC Barcelona

 

 

Quemado no, pero decepcionado sí: "Cuando llegas y ves cosas a nivel de funcionamiento que no están bien, es normal que te decepciones. Por algo está pasando todo lo que está pasando. Me fui con una sensación de tristeza en ese sentido. Tuvimos que renunciar a una parte importante de nuestro contrato y a Setién todavía no le han pagado. Pero no cambio por nada del mundo lo que me pasó en el Barça".

Por último, Sarabia apuntó que no borraría nada de su paso por el club catalán: "Me ha servido para aprender mucho. Todo lo que me pasó en el Barça me ha hecho ser mejor. Incluido el 2-8. No era un equipo preparado para afrontar retos importantes. Estaba cogido con hilos. Lo de Vigo son circunstancias que pasan con los jugadores".