El exbarcelonista Andrés Iniesta, a sus 36 años, ha recaído de una lesión muscular al tirar un penalti con el Vissel Kobe en los cuartos de final de la Liga de Campeones asiática, y se juega su retirada. Tras el partido abandonó la burbuja de la competición en Catar, y se desplazó hasta Barcelona para ser operado por el doctor Ramon Cugat.
El excapitán culé ya estaba tocado. Entró en la prórroga a falta de ocho minutos y se rompió en la tanda de penaltis. El diagnóstico médico señala una rotura del tendón del músculo recto femoral proximal, el jugador estará cuatro meses de baja y puede avanzar su retirada de los campos de fútbol.
Jugó tocado
En el encuentro de octavos de final, frente al equipo chino Shanghai SIPG, Iniesta tuvo que retirarse por unos problemas en la pierna derecha. Los servicios médicos le diagnosticaron una rotura del tendón del músculo recto femoral proximal, pero Iniesta decidió seguir en la competición.
Andrés Iniesta en un partido con el Vissel Kobe / EFE
Frente al equipo coreano, el Suwon, el campeón del mundo entró en la segunda parte de la prórroga, en el 112, para ayudar a su equipo, cuando iban empate (1-1). Llegaron a penaltis y decidió ser el primer lanzador del equipo. En su golpeo las molestias se agravaron. Anotó el penalti, pero el de Fuentealbilla se resintió. El equipo, finalmente, se clasificó para la siguiente ronda.
Operación con éxito
El centrocampista español decidió poner rumbo a Barcelona para ser operado por el doctor Cugat, y la operación ha sido un éxito. Ahora toca pensar en volver. O no, porque, a sus 36 años, es la lesión más grave que ha sufrido el exinternacional con España en la última década.
Iniesta se perderá el último encuentro de la competición liguera ante el Tokyo, además del inicio de la siguiente temporada que tendrá lugar en febrero. Iniesta podría estar diciendo adiós al mundo del fútbol con esta lesión.
Andrés Iniesta, en su despedida del Camp Nou | EFE
Su equipo, el Kobe japonés, perdió en semifinales, en un partido en el que también fueron al tiempo de prolongación. Pero en el último minuto, un penalti en contra arruinó sus aspiraciones.