La subdirectora de El Mundo Deportivo Cristina Cubero ha rememorado, a causa del reciente fallecimiento de Diego Armando Maradona, una conversación con Leo Messi en 2005. Por esas fechas Messi era aún una joven promesa dando sus primeros pasos en la élite del fútbol.
La charla tuvo lugar la víspera del debut del actual jugador culé en la selección argentina. Fruto de la casualidad, su primer encuentro con la absoluta albiceleste fue contra Hungría, el mismo país que enfrentó por primera vez Maradona con la camiseta de Argentina.
Messi y Maradona en un entrenamiento de la selección Argentina / EFE
Desgraciadamente para Messi no fue su debut soñado. Un minuto y medio después de hacer su aparición en el terreno de juego la Pulga fue expulsado. Messi pensó que su carrera como jugador en la selección había llegado, de manera precoz, a su fin: “Nunca más me volverán a convocar...”. No era consciente de la carrera que le esperaba.
Diego hacia feliz a la gente
En ese encuentro con Cristina Cubero el delantero del Barça, entre otras cosas, habló de Maradona. “Vi jugar a Maradona de chiquito, en mi cancha (Newell’s), tenía apenas cinco años. Fui con mi viejo. Apenas recuerdo nada de aquel día, sólo que durante años me hablaron de que había tenido el privilegio de ver a Maradona en directo. Diego hacía feliz a la gente, es especial” le explicó a Cubero.
Maradona en un entrenamiento con Argentina / EFE
Y es que el Pelusa, ante todo, disfrutaba de su estancia en el verde. No solo disfrutaba él, sino que hacía disfrutar. Pero evidentemente, Maradona tiene una connotación especial para Argentina.
Por si no fuera suficiente, no es únicamente uno de los mejores (por no decir el mejor) jugadores de fútbol de todos los tiempos, sino que se ganó eternamente el corazón de todo un país en su gesta contra Inglaterra.
Maradona ganó a los ingleses
En el mundial de México 86 Argentina le ganó 2-1 a Inglaterra en los cuartos de final con dos tantos del Cebollita. El primero de ellos fue la famosa mano de Dios. El segundo, una obra de arte.
“Un gol, el de Maradona contra Inglaterra en el Mundial de México’86 es lo más grande que ha dado el fútbol. Puedo verlo por la mañana, al mediodía, por la noche, no me canso nunca, nadie se cansa. Si pasan ese gol por televisión sales a la calle y todo el mundo habla en las tertulias. Imagina la de veces que lo habrán visto, es igual, no importa. No sólo era el gol ¡es que fue a los ingleses! Mi viejo (Jorge) y mi tío Claudio se pasan horas hablando de Maradona ... Cuando visitabas a algún familiar te ponían delante de la tele para que vieras de nuevo aquel gol”, explicaba Messi.
Se le ha perdonado todo
Sin embargo, Maradona no era perfecto. Una de sus debilidades fueron las drogas, aunque eso no impidió su leyenda. Messi confesó a Cubero la necesidad de ser argentino para entender que, allí, se le perdonaran todos sus excesos: “nos ha dado tanto…”.
Un aficionado lamentando la muerte de Maradona / EFE
“A Diego se le ama y se le amó incluso cuando cayó en ese mundo, porque todos estaban tristes, todos sufrían con él, toda Argentina quería ayudar a Diego a salir... Argentina se puso mal cuando Diego se mostró así, pero todos reaccionaron” declaró el joven Messi de hace 15 años.