Leo Messi es la figura indiscutible del FC Barcelona y de la selección argentina. En la madrugada de este viernes tenía la difícil misión de guiar a su país contra Paraguay en la tercera jornada de la clasificación del Mundial de Sudamérica. No pasaron del empate a uno, pero siguen liderando la tabla.
El argentino lo intentó de todas las maneras, sacando motivación de donde parece que no había. Llegó a enviar un balón al palo que, en caso de ir entre los tres palos, hubiera sido el de la victoria. También vio portería tras una gran acción colectiva que fue anulada posteriormente por una falta previa. Según el colegiado, Nicolas González cometió una infracción.
El 10, que parece que con Argentina saca todo el carácter que guarda en Barcelona, se dirigió al colegiado Raphael Claus y le comentó sin tapujos que “ya nos cagaste dos veces”. El delantero ya venía caliente de las polémicas decisiones arbitrales que firmaron los colegiados en el último partido contra Bolívia.
Messi observando su gol en el VAR / Redes
El segundo error al que se refirió Messi fue un penalti a favor de Paraguay tras una rigurosa falta que se había producido exactamente igual minutos antes en el otra área. También reclamaron los argentinos una expulsión de Ángel Romero a Exequiel Palacios por un duro golpe con la rodilla totalmente innecesario. También fue obviado por el VAR.
Muchos nombres, poco orden
Lionel Scaloni decidió rodear a Messi de peloteros para sacar el partido adelante. Quizás la apuesta fue demasiado atrevida, mucho balón, pero poco desborde. Un desorden que el capitán trató de organizar cuando la jugada se paraba. El 10 más tres delanteros y tres centrocampistas.
De los once titulares, el seleccionador escogió un tridente en la medular con Leandro Paredes (PSG), Exequiel Palacios (Bayer Leverkusen) y Rodrigo de Paul (Udinese). El delantero de Stuttgart Nicolas González, autor del gol en un córner, hacía de carrilero izquierdo; mientras que Lucas Ocampos (Sevilla) y Lautaro Martínez (Inter de Milán) eran las referencias.
Muchas piezas ofensivas no significan más ocasiones, el equipo necesitaba un orden y Messi no veía ninguno. Aunque había tres centrocampistas, el balón no pasaba de la red que habían tejido los paraguayos y fue el azulgrana quien tuvo que bajar a recibir el balón en la zona de creación, algo que ya hemos visto en el Camp Nou.
Control exquisito de Messi con Argentina / Redes
Con la entrada de Giovanni Lo Celso (minuto 29) y de Ángel Di María (minuto 60) el equipo mejoró. Son titulares habituales, que ya tienen entendimiento con el capitán y el equipo se reorganizó mejor. Se espera que contra Perú, uno de los rivales más complicados, ambos sean titulares.
Parece que no solamente Messi se siente solo en Barcelona, sino que también le cuesta encontrar su sitio con Argentina. Aunque volvió a ser el mejor un día más --marcando y liderando--, no fue suficiente contra Paraguay. Necesita estar bien rodeado y hace tiempo que Leo lo echa de menos.