Hay futbolistas que tienen la capacidad de rendir de dos maneras totalmente diferentes según si juegan sus partidos con la selección o lo hacen con su club habitual. El famoso ecosistema afecta mucho a los jugadores. Éste es precisamente el caso de dos cracks mundiales, Antoine Griezmann y Paul Pogba.
El delantero del Barça muestra una cara totalmente diferente cuando se viste de azul. Allí es junto a Kylian Mbappé la referencia ofensiva y Didier Deschamps ya se encarga de transmitirlo así. Contra Portugal (0-0), en partido de la UEFA Nations League, jugó de falso nueve con total libertad, una posición que en el Camp Nou ocupa Leo Messi.
Publicación de Griezmann con Pogba / Redes
También es uno de los más veteranos, aunque tenga 29 años. En una joven Francia, con Benjamin Pavard, Lucas Hernández, Adrien Rabiot o el propio Mbappé; es él quien lidera al equipo. Cada vez que va a Clairfontaine, ciudad deportiva Les Blues, se siente cómo el líder que era en el Atlético de Madrid.
Más complicado para Pogba
Paul Pogba es un ejemplo de aquellas carreras que se truncan por malas decisiones. El centrocampista francés, uno de los más poderosos de los últimos años, escogió el Manchester United para dar el salto a la Premier League. Dejó así a una Juventus de Turín ganadora que había disputado la final de la Champions en 2015 contra el Barça.
El tiempo ha demostrado que su elección no fue la correcta. Los ingleses abonaron 105 millones de euros por él, le vendieron un proyecto ganador y cinco años después ni rastro de importantes títulos y de luchar con los clubes grandes. Y es que el francés puso su grano de arena durante los tres primeros cursos --llegando incluso a marcar 13 goles en la Premier en un solo año-- pero no fue suficiente.
El pasado verano pidió salir, cosa que rechazaron en Old Trafford. Su intención era irse al Real Madrid, pero no hubo acuerdo y se quedó a regañadientes en Manchester. Por supuestos problemas en el tobillo, solamente jugó 19 partidos oficiales con los red devils la temporada 2019-20. Este curso, ya suma cuatro.
Pogba, en una imagen de archivo con el Manchester United / EFE
Pogba, como sucede con Griezmann, también agradece la llamada de Deschamps. Se vuelve a sentir el futbolista de Turín o de los primeros años en Old Trafford, con libertad, líder y capaz de todo. A sus 27 años, puede ser uno de los nombres del próximo verano. Termina contrato y no tiene intención de renovar.
Su sueño, tal y como ha reconocido su familia, es encontrarse con Zinedine Zidane en el Real Madrid. Eso sería dos años después de los primeros contactos y de negociaciones que no llegaron a buen puerto. Si sigue sin prolongar su vinculación, será el técnico quien tenga la clave de su futuro.
Empate contra Portugal
Francia, liderada por Griezmann y Pogba, no pudo vencer este domingo a la Portugal de Cristiano Ronaldo en la UEFA Nations Cup. Firmaron las tablas a cero en uno de los encuentros más flojos de los galos ante una de las selecciones que más promesas tiene en sus filas. La Eurocopa será reñida.