Sin Jasikevicius en el banquillo, el FC Barcelona protagonizó su peor partido en lo que va de temporada. Los culés no supieron cerrar el choque ante el Zenit de San Petersburgo en ningún momento, y lo acabaron pagando. Los rusos no perdieron la cara al choque en todo el encuentro, y en un final igualado, supieron defender perfectamente su mínima ventaja y llevarse un triunfo sorprendente (74-70).
El Barça desperdicia un buen inicio
Una hora después de lo que estaba previsto, y con algunas bajas por parte del Zenit con casos de coronavirus, el Barça se presentó en San Petersburgo con la intención de confirmar su buen inicio de temporada. Desde la llegada de Sarunas Jasikevicius, el cuadro catalán se está mostrando en los primeros choques de curso como un equipo coral, con muchas opciones, esfuerzo constante en defensa y solidaridad.
Su inicio está siendo inmejorable. No conocen todavía la derrota ni en ACB ni en Euroliga, donde además superaron en la primera jornada, y de forma solvente, a uno de los favoritos para alzar el trofeo: el CSKA de Moscú. En este segundo partido en Europa, se enfrentaban a un Zenit con dos caras muy conocidas: el técnico Xavi Pascual y su fichaje estrella, Kevin Pangos.
Calathes y Pango, protagonistas del Barça-Zenit | FCB
El FC Barcelona empezó bien el choque, aupado por la buena dinámica. De la mano de Calathes y Abrines, el conjunto culé consiguió una ventaja de diez puntos en los primeros minutos. Sin embargo, con las rotaciones todo cambió. Los jugadores del equipo ruso se enchufaron, gracias al acierto de Baron. Los hombres de esta vez Tomas Masiulis, ya que el técnico principal es baja por Covid-19, desperdiciaron su preeminencia, y se marcharon al descanso solo tres puntos arriba (35-38).
Cuando no cierras el partido, lo acabas pagando
La igualdad fue también la nota predominante tras el paso por los vestuarios. Los culés intentaron escaparse en el marcador en un par de ocasiones, pero el Zenit, en un claro ejemplo de resistencia, nunca agachó la cabeza ni perdió la cara al partido. Una característica típica de los equipos de Xavi Pascual.
Higgins, en una acción ante el Zenit | EFE
Los nervios llegaron al conjunto azulgrana cuando, a menos de tres minutos, KC Rivers anotó su segundo triple consecutivo y puso por delante a los rusos. Y a diferencia del Barça, el Zenit sí supo defender su mínima ventaja en las últimas acciones. Calathes, con un triple, tuvo la opción en los últimos segundos de empatar, pero el balón no entró. Sin Jasikevicius en el banquillo, el cuadro culé sumó su primera derrota de la temporada, en un enfrentamiento claramente marcado por el coronavirus.