Luis Suárez tiene las horas contadas en el Barça. El nuevo técnico culé, Ronald Koeman, le comunicó hace unas semanas que no cuenta con él para su nuevo proyecto, y que debía buscarse un nuevo destino. Y lo hizo en una llamada de poco más de un minuto que comportó el cabreo monumental del charrúa.
No obstante, pese a esto, se ha mantenido tan profesional como el primer día. Pasó junto a sus compañeros los test PCR, y sigue entrenando con el grupo hasta acordar su futuro, que podría decidirse en los próximos días. Tiene ya un acuerdo cerrado con la Juventus, y solo le falta realizar un examen para ser comunitario y negociar su contrato con el FC Barcelona para ser bianconnero.
Luis Suárez y Arturo Vidal, en un entrenamiento | FCB
Este sábado, se produjo un nuevo capítulo que vuelve a evidenciar la mala gestión del club culé ante la salida de una de sus grandes leyendas, y cuarto máximo goleador histórico. Según ESPN, en el último entrenamiento Koeman decidió prescindir de él y de Arturo Vidal, y los obligó a entrenarse al margen junto a un preparador físico, a la espera de resolver su futuro. Una decisión que ha provocado la respuesta pública del charrúa.
Contundente
A través de su Instagram personal, Suárez publicó un mensaje donde lanzó un contundente dardo dirigido especialmente a Koeman y al Barça, y donde criticó las formas en las que se está ejecutando su marcha después de siete años. “Nunca dejaré de seguir disfrutando de algo que siempre quise”. A este mensaje le añadía los siguientes hastags: #siemprepositivo y #nadiemequitalailusión.
Las últimas decisiones con el uruguayo perjudican al Barça. Y es que Suárez, tras su enfado considerable, no está dispuesto a ceder ni un solo euro de su contrato. La intención del club culé es no pagarle los dos años que le quedan, e incluso sacar un pequeño traspaso más variables a la Juventus. No obstante, no parece que el charrúa vaya a poner tan fácil su salida.