Este fin de semana, el Villarreal despidió a dos de sus grandes estrellas de la historia reciente del submarino amarillo: un Santi Cazorla que se marcha a Qatar, para deslumbrar con sus últimos toques de magia a las órdenes de Xavi Hernández; y Bruno Soriano, que colgará las botas tras superar un parón de tres años por las lesiones.
La despedida del pequeño centrocampista fue especialmente sentida por el fútbol español. No solo porque unos problemas físicos estuvieron a punto de dejarle sin caminar; sino también porque se trató de la marcha de uno de los últimos héroes del Mundial conseguido por España en 2010.
Los jugadores del Villarreal mantean a Cazorla en su despedida | EFE
Una década ha pasado ya desde que Iniesta superó a Stekelenburg en la final de Johannesburgo, para alzar a la gloria a un combinado español repleto de jugadores del Barça. Tanto en la columna vertebral de ese equipo como en el estilo de juego tuvo un papel fundamental el club culé. Un recuerdo que será imborrable, pero del que cada vez quedan menos supervivientes.
Ramos, Piqué, Navas y Busquets, los últimos perdurables
Con el paso de los años, muchas piezas clave de una plantilla ya histórica han ido despidiéndose del fútbol profesional de primer nivel. Cazorla se unirá a los Xavi, Villa, Torres, Casillas o Iniesta que optaron por una última experiencia exótica antes de colgar las botas.
Los jugadores del Barça, levantando el Mundial con España | EFE
Por su parte, jugadores como Albiol, Pepe Reina, Cesc Fábregas, Pedro Rodríguez o David Silva siguen demostrando sus últimas muestras de calidad en equipos de primer nivel. Sin embargo, hay que destacar que, diez años después, solo son cuatro los futbolistas que podrían formar parte de este legendario equipo.
Sergio Ramos, Gerard Piqué, Jesús Navas y Sergio Busquets siguen rindiendo a un nivel titánico. Cuatro piezas clave de la España campeona del mundo, que siguen demostrando por qué fueron determinantes para levantar el campeonato.
Cazorla, junto a Xavi y Piqué en un partido con España | EFE
No obstante, el caso de Cazorla es mucho más inspirador y preocupante. Se marcha el último de los grandes intérpretes del centro del campo. Jugadores como Fabián Ruiz, Riqui Puig, Saúl Ñíguez o Dani Olmo están dispuestos a ocupar su relevo. Pero todavía tienen mucho que demostrar. Y no tendrán fácil el hacer olvidar a la mejor medular de la historia de España.