Toda la ilusión que generaron los rumores acerca de un posible retorno de Pau Gasol al FC Barcelona ha desaparecido en cuestión de días. Si el miércoles el club lanzaba un comunicado en el que explicaba que las noticias relativas al de Sant Boi no eran reales, este viernes ha sido Joan Bladé, responsable de la sección, quien ha desestimado la posibilidad de ver al mayor de los Gasol vestido de azulgrana.
El directivo ha afirmado que "en ningún momento ha habido ninguna negociación ni la habrá". Eso sí, Bladé ha reconocido que "Pau Gasol es una persona importante para el club, un embajador clave en el mercado norteamericano. Esperamos que se pueda cumplir su sueño de jugar los Juegos Olímpicos de Tokyo".
Calathes ya es culé
Bladé ha pronunciado estas palabras en la presentación de Nick Calathes como nuevo jugador del FC Barcelona. El base griego ha pasado el reconocimiento médico y posteriormente ha señalado que "estoy muy ilusionado por jugar en Barcelona, es un club de primera clase. Basta con ver lo que han hecho los últimos tres años".
Calathes en su presentación como jugador del Barça / EFE
El ex de Panathinaikos ha recordado que el club azulgrana "ha traído a grandes jugadores que quieren ser los mejores. Yo espero convertirme en una pieza importante de este puzzle. Jugadores como Nikola Mirotic o Cory Higgins, entre otros, creo que encajan con el estilo de juego que tengo".
Calathes, que vestirá el dorsal 99 en el Palau Blaugrana, reafirmó que "para cualquier jugador europeo el Barça es el equipo más importante de Europa. Para mí siempre ha sido un sueño jugar aquí, cuando me llamaron fue muy fácil decidir".
Experiencia con Saras
Calathes recordó su experiencia con el entrenador del FC Barcelona, Sarunas Jasikevicius, en su primera etapa en Panathinaikos: "Al principio le odiaba, me gritaba mucho y estaba encima de todo. No me daba cuenta de que estaba intentando que yo mejorara como jugador. Somos buenos amigos y he estado en contacto con él estos años".
Calathes en su presentación / EFE
El base griego considera que el Barça es "el mayor desafío" de su carrera: "Venir a jugar a otro país es un desafío absoluto. Pero si te fijas en el equipo, en los compañeros, y en lo que dice la gente de este club, la decisión resulta muy fácil. Además tengo un gran feeling con Jasikevicius, es un buen momento para cambiar de aires".