You’ll Never Walk Alone fue la canción más escuchada de largo este jueves por la noche en la ciudad de Liverpool. 30 años después de ganar su última liga inglesa se coronaron como campeones de la Premier League. Eso sí, no lo hicieron sobre el césped, sino por pasiva. El Manchester City perdía contra el Chelsea (2-1) y dejaba la gesta imposible a falta de siete jornadas.
Con 31 partidos disputados, los de Anfield Road han firmado unos registros casi perfectos: 28 victorias, dos empates y solo una derrota. Un total de 86 puntos, 23 por encima del segundo clasificado, el conjunto de Pep Guardiola (63). Un título más que merecido que llevaba tiempo madurando.
Como hemos comentado, hacía tres décadas que los reds no levantaban la liga. Los dos años que la tuvieron más cerca fue en 2014 cuando un desafortunado resbalón de Gerrard ante el Chelsea dejó a los de Stamford Bridge por delante en la clasificación. También cabe destacar que el curso pasado se quedaron en las puertas con 97 puntos, uno por debajo del City.
Jurgen Klopp, el nuevo héroe de Anfield
Jurgen Klopp escribió este jueves otra página en la gloriosa historia del Liverpool. Uno de los clubes con mejor palmarés internacional todavía no había alzado la Premier League. Ahora esa maldición se ha roto gracias al alemán. Con él en el banquillo, han sido los amos de principio a fin.
Juegen Klopp con Alisson Becker celebrando la victoria del Liverpool / EFE
Y es que el ex del Borussia Dortmund es un ejemplo de motivación, constancia y superación. Perdió dos finales de la Champions League en su carrera --la primera con los alemanes contra el Bayern de Múnich y la segunda con los ingleses contra el Real Madrid--, y al año siguiente --2018-19-- volvió y la levantó contra el Tottenham.
Lo mismo le sucedió en la liga. Pocas veces un equipo consigue 97 puntos como los que firmaron el curso pasado y se queda sin el título de campeón. Y sucedió. El Manchester City fue más regular y consiguió mantener la distancia de un punto hasta el último día. Ahora se han vengado por todo lo alto: 23 puntos de diferencia.
Minutos después de confirmarse como campeones de la Premier League, hizo sus primeras declaraciones en Sky. Visiblemente emocionado comentó que “es más de lo que nunca había soñado. No tengo palabras. Nunca pensé que sentiría esto. Es un logro increíble de mis jugadores, es un privilegio ser su entrenador. Y no puedo estar más orgulloso de mi cuerpo técnico. Es para todos vosotros, los hinchas, espero que os quedéis en casa, como mucho salid a la puerta y celebrad”.
El duelo del morbo
Si hay un partido que en los últimos años se ha convertido en un clásico es el Liverpool-Manchester City. Dos entrenadores diferentes, dos estilos opuestos pero dos conjuntos ganadores. Ya se vieron las caras en la Champions League el curso pasado o en un encuentro en la primera vuelta donde saltaron chispas en la banda. Ambos cayeron del lado red.
El próximo dos de julio a las 21:15 se volverán a reencontrar en el Eithad Stadium. Los cityzens deberán hacerles el pasillo a su criptonita en la liga inglesas. Un partido intrascendente, pero con mucho morbo. Antes Guardiola y los suyos se pueden sacar la espinita contra el Newcastle en la final de la FA Cup.