Actualmente el papel de la mujer en la sociedad gana peso y es más reconocido en una tendencia hacia la igualdad inpendientemente del sexo. Aunque esta sea la situación ahora mismo, fueron muchas las que tuvieron que pelear contra prejuicios para conseguir derechos que los hombres ya tenían. Nacer mujer sigue comportando hoy en día ciertas dificultades a las que los hombres no deben enfrentarse, pero durante el siglo pasado la situación era mucho más cruda.
El mundo del deporte era un espacio reservado a los hombres, especialmente la práctica del deporte. Las mujeres solo aparecían como espectadores o como parte del decorado que contribuía a embellecer el espectáculo. El deporte estaba principalmente dirigido a los espectadores masculinos y por ello las jóvenes ejercían de modelos o azafatas entregando ramos de flores y premios.
Además existían contraindicaciones médicas para que las mujeres se convirtiesen en deportistas, ya que se creía que la práctica del ejercicio a nivel profesional podía dar problemas en el momento de ser madres. Actualmente se sabe que no existe ningún problema así que estas indicaciones se daban por ciertas sin ningúna prueba real.
El Barça fue creado y pensado para los hombres a finales del siglo 19 y los estatutos ni siquiera mencionaban a las mujeres. Fue el 1 de enero de 1913 cuando Edelmira Calvetó consiguió inscribirse en el Barça, pese a contradecir con esta acción los Estatutos. La socia se hacía con el número 86 y lograba así, gracias a su persistencia, que las mujeres pudiesen formas parte del club.
La primera empleada del club
En el número nueve de la Rambla de Canaletas comenzó a trabajar como portera y "para todo trabajo útil" la primera empleada de la historia del FC Barcelona. La mujer fue contratada el 4 de mayo de 1914 cuando la junta directiva estaba presidida por Francisco de Moxó. Era viuda y tenía hijos menores de edad y el club acordó pagarle cinco pesetas al mes a cambio de su trabajo.
El club no solo contrató a la mujer, también decidieron que su hijo mayor formase parte de la empresa. Al joven le dieron un generoso anticipo de 20 pesetas. La cantidad no era nada despreciable, en aquella época el doctor Feliu Castells cobraba dos pesetas por cada visita a un jugador además de cinco pesetas por la asistencia a los partidos.
La mujer y el Barça
El papel de la mujer no estuvo siempre consolidado, durante el franquismo la situación se volvió complicada y las mujeres perdieron muchos de los derechos por los que habían peleado durante el siglo 20. En los años ochenta las mujeres recuperaron terreno en la sociedad y el deporte. Actualmente lun 26% de la masa social del club está formado por mujeres, tienen una gran presencia en las peñas y algunas tienen presidentas mujeres.
Edelmira Calvetó, Maria Teresa Andreu, directiva del club e impulsora del fútbol femenino, que se terminó siendo directiva de la UEFA y aquellas mujeres que nos han dado triunfos en las distintas secciones del Barça son solo algunos de los ejemplos de la importancia del papel de la mujer en el FC Barcelona, en el deporte y en la sociedad.