El balón, elemento de riesgo en la transmisión del coronavirus
¿Qué medidas pueden tomarse para minimizar el peligro para la salud de los jugadores?
24 abril, 2020 10:47A causa de la pandemia de COVID-19 casi todas las competiciones deportivas alrededor del mundo se han parado pero la mente de aquellos que las organizan ya piensan en como reiniciar los encuentros sin que sea un riesgo para la salud de todos. En estos momentos, a pesar de que se mediten protocolos y medidas para que la acción regrese a los terrenos de juego, no sería responsable retomar las competiciones .
¿Qué medidas pueden tomarse?
La Federación de Médicos Deportivos ha querido compartir sus ideas sobre esta posible vuelta al trabajo y ha advertido de que el peligro no solo está en el contacto directo entre los jugadores: "El balón puede ser una causa potencial de contagio". Siguiendo este consejo, los jugadores podrían regresar a ejercitarse pero sin balón, algo que ya se está llevando a cabo en Alemania,
La Bundesliga ha regresado al trabajo pero en condiciones muy distintas a las habituales. Los jugadores acuden en grupos de tres a entrenar y no lo hacen con balón, además las medidas de higiene se han extremado para minimizar riesgos. En Alemania la situación parece estar más controlada que en otros países europeos ya que a pesar de que la cifra de contagios se eleva por encima de los 150.000 la de fallecidos se mantiene alrededor de los 5.000.
En España se ha desarrollado un plan para la vuelta a los entrenamientos que incluye nuevas normas como entrenar con guantes, no pasarse el balón, no hacer piñas ni ejercitarse en el gimnasio del equipo y además no cambiar el coche con el que se acude a los entrenamientos. Este plan aún debe ser aprobado por Sanidad y no hay fecha para la vuelta a la rutina.
Hay muchas dudas entorno a cómo se podría volver al trabajo: los guates y las mascarillas son una opción pero los remates de cabeza y el contacto entre jugadores es complicado de controlar. Además de las complicaciones de reanudar la competición, los clubes deben afrontar también la posibilidad de que se juegue sin público.