España vive una situación sin precedentes en lo que va de siglo. El país se encuentra duramente afectado por el coronavirus. Más de 130.000 españoles padecen o han padecido la nueva enfermedad, que ya se ha cobrado más de 12.000 vidas. Parece que los contagios se estabilizan, pero aún queda mucho por delante.
El sábado, el Gobierno decretó la prórroga del Estado de Alarma hasta el 26 de abril. Ya han pasado tres semanas desde el inicio del confinamiento y pasarán como mínimo tres más. Pedro Sánchez ya advirtió que cuando todo acabe, el regreso a la normalidad deberá ser de forma progresiva.
Las competiciones deportivas, evidentemente, están completamente paralizadas. Ahora, entidades, clubes y deportistas son protagonistas por otros motivos: o bien por sus donaciones, o bien por las campañas contra el coronavirus. La última organización en lanzar un vídeo de apoyo ha sido la Real Federación Española de Fútbol.
En deuda
En el documento se juntan imágenes con la voz de Luis Enrique, seleccionador nacional. "Señores, dejémonos de charlas: ha llegado el momento", empieza diciendo el técnico asturiano. "Dejémonos de colores, de equipos, esto es la selección, aquí juegan los mejores y nosotros lo seremos", continúa.
El ex del FC Barcelona recuerda que "sanitarios, policías, militares, bomberos, reponedores, cajeros, servicios de limpieza, farmacéuticos, transportistas" se están volcando para solucionar la crisis cuanto antes. "Hay gente que lo está dando todo, que pelea, que lucha, y lo hace hasta dar su último aliento".
"Lo hacen ante un rival difícil, desconocido, incierto, y eso es lo que les hace grandes, el valor de enfrentarse a ello. Seguro que nuestros mayores, si pudieran, se enfrentarían. Otras veces ya lo han hecho, sin pedir nada a cambio. Han sido una generación de héroes que nos lo dieron todo. Estamos en deuda. Debemos hacerlo por ellos".
El vídeo concluye con un mensaje de ánimo: "Llevamos días, semanas, peleando contra este rival que se ha llevado a muchos de los nuestros. Así que no, no es el momento de rendirse, España no sabe hacer eso. Todos, en lo personal o en lo profesional, jugamos alguna vez el que será el partido de nuestras vidas".