Johan Cruyff era una persona diferente. En octubre de 2015 al exjugador le diagnosticaron cáncer de pulmón que causó su fallecimiento en marzo de 2016, pero no dejó que la negatividad de la situación le invadiese por completo. Su hijo Jordi Cruyff ha contado en Cadena Ser cómo afrontaría su padre la crisis sanitaria actual.
Johan Cryuff era un hombre positivo, capaz de encontrar algo bueno en cualquier cosa que le sucediese. Jordi Cruyff ha acudido al programa 'El Larguero' como colaborador y ha contado una anécdota sobre su padre que refleja perfectamente su actitud en la vida: “Cuando le informaban si había mejorado o si habían aparecido nuevos tumores, supongo que como no sabía cómo decírselo a mi madre, cuando tenía malas noticias, le decía: <Danny, tengo buenas noticias. Me han encontrado otro tumor>. Ella decía: <¿Qué buena noticia es ésta?>. Él contestaba: <como me lo han encontrado, me lo pueden tratar. Si no, crecería y estaría mucho peor>”. Su hijo no sabía cómo reaccionar ante esto: “Cuando escuchaba esto, yo no sabía si reír o llorar, porque eran malas noticias. Era un hombre optimista de la vida”.
Cruyff, positividad ante todo
Al ser preguntado sobre cómo vería su padre la situación por la que el mundo está pasando actualmente, Jordi Cruyff tiene claro que intentaría encontrar algo bueno en esta crisis causada por el COVID-19: “A mi padre nunca le interesó el tema de Internet. Nunca tuvo móvil. Todas estas cosas no le interesaban. Disfrutaba haciendo puzzles o crucigramas. Se sentaba en cualquier rinconcito, en cualquier ventana, donde diera el sol, allí estaba él. Le gustaban los puzzles de no sé cuántas las piezas y se podía pasar horas”.
Jordi Cruyff está seguro de que su padre intentaría aprovechar este tiempo para dedicarse a sus hobbies y solo estaría centrado en el futuro: “Él vería el otro lado. El hecho de que el mundo esté parado significaría que el planeta se está limpiando, teóricamente. Él estaría buscando cualquier excusa para mirar adelante y no atrás”.