En el mundo del deporte siempre es muy difícil hacer comparaciones entre deportistas y futbolistas, especialmente en aquellos de épocas muy distintitas. El fútbol ha cambiado mucho en las últimas décadas. Ahora mismo hay mucha más preparación física, se tiene en cuenta la nutrición, se analiza mucho más a los rivales… De esta manera el debate frecuente es quién ha sido el mejor jugador de la historia: Pelé, Maradona y Messi.
En ese sentido, el brasileño no ha escondido nunca el rendimiento que tuvo durante prácticamente 20 años en el Santos, así como los tres mundiales que consiguió con la Canarinha. Ésta vez ofreció una entrevista en el canal de Youtube Pilhado en la que expuso que, a pesar de grandes futbolistas como Zico, Ronaldinho o Ronaldo y Beckenbauer o Cruyff en Europa, “creo que Pelé era mejor que ellos, porque a todos los comparan conmigo".
El brasileñó también recordó a su padre: “marcó cinco goles de cabeza en un partido y ese es el único récord que no batí”, rememoró Pelé. De mismo modo concluyó que “Pelé solo hay y habrá uno. Igual es porque Dios me quiere. Hubo un rey y habrá algunos príncipes. Pero gané tres campeonatos del Mundo"
Asimismo también se posicionó en la habitual dicotomía entre Cristiano Ronaldo y Messi. Pelé sostuvo que "hoy por hoy, Cristiano es el mejor del mundo, aunque no hay que olvidarse de Messi. Sin embargo, Cristiano es más regular y Messi no es un goleador". Estos datos, sin embargo, son bastante discutibles ya que el portugués solo lleva un gol más en su carrera a nivel de clubes que el argentino a pesar de tener dos años más. A su vez, también es evidente que Messi tiene mucha más repercusión en el desarrollo del equipo.
Finalmente también negó las declaraciones públicas de su hijo en las que afirmó que Pelé sufría una depresión: "Eso lo inventaron. Preferiría haber llegado aquí sin andador, entrenar un poco, jugar a la pelota. Pero me estoy recuperando y, gracias a Dios, después de todo lo que he hecho en el deporte estoy bien. Gracias a Dios me estoy recuperando", concluyó o Rei.