Semana monotemática en todas las redacciones del país. La escalada del coronavirus en los últimos días ha sido el gran y prácticamente único tema de conversación. La subida exponencial de casos, ya por 5.200, las medidas que se han tomado para tratar de frenarlo y las decenas de conferencias de prensa dando explicaciones han monopolizado la agenda.
Por un motivo u otro, todos los medios de comunicación del país han hablado del COVID-19. Generalistas, culturales o deportivos. La inmensa cantidad de competiciones que se han aplazado, suspendido o cancelado por el coronavirus ha sido el gran tema de conversación en los últimos días en las redacciones de deportes.
Disimulado
Todo lo que ha provocado la nueva enfermedad a nivel deportivo ha opacado el deporte en sí. Se ha dejado de hablar de resultados, de sensaciones y de demás aspectos que, en estos momentos, son lo de menos. Algo que, hasta cierto punto, agradecen los dos grandes clubes españoles: FC Barcelona y Real Madrid. Ninguno de los dos pasaba por su mejor momento.
El capitán del Barça, Leo Messi, se lleva las manos al rostro / EP
Por lo que respecta al conjunto azulgrana, se venía mostrando muy irregular estas últimas semanas. Capaz de vencer cómodamente al Eibar (5-0), de sufrir contra la Real Sociedad (1-0) y de perder con merecimiento en el Santiago Bernabéu (2-0). La crisis parecía estar a punto de llegar en Can Barça, pero el coronavirus la ha frenado.
Peor estaba la entidad de Chamartín. Sus últimos resultados fueron preocupantes. En Liga, más allá de ganar el clásico, venía de empatar contra el Celta y de perder ante Betis y Levante. En Champions, el Manchester City le pasó por encima (1-2). Zidane estaba en una situación delicada y ahora ya nadie lo recuerda. Tampoco es lo más importante.
Tiempo para trabajar
A este respiro que el coronavirus da a Barça y Real Madrid hay que añadir que, mientras las competiciones sigan paradas, ambos equipos tendrán tiempo más que suficiente para trabajar. Aunque sea en el apartado físico, pues tanto blancos como azulgranas no se ejercitarán en la Ciutat Esportiva. Cada futbolista seguirá las pautas marcadas en su domicilio.
Setién dirigiendo al Barça en un encuentro /Twitter
Al menos, Setién y Zidane, junto con sus respectivos cuerpos técnicos, tendrán tiempo de sobras para analizar los encuentros pausadamente y tratar de mejorar aspectos tácticos del juego. Esto vendrá bien especialmente al equipo catalán, que no había acabado de asimilar las ideas del técnico cántabro.
El coronavirus da un respiro a FC Barcelona y Real Madrid. Cuando se reanuden las competiciones, si es que se reanudan, azulgranas y blancos tendrán una nueva oportunidad.