Este Atlético de Madrid es imprevisible. Los aficionados colchoneros pueden pasar del llanto a la gloria en décimas de segundos. Y es que el mismo equipo que cayó eliminado de forma desastrosa en la Copa del Rey por un conjunto de tercera división, hoy ha sido capaz de vencer al campeón de Europa, el Liverpool (1-0).

Los hombres del Cholo Simeone, apoyados por un Wanda Metropolitano ensordecedor, demostraron que al Atleti nunca se le puede dar por muerto. Los rojiblancos se comieron a los de Klopp en las primeras acciones del choque, y se adelantaron en el marcador muy pronto con el gol de Saúl. Un tanto que acabó siendo decisivo.

Los jugadores del Atlético de Madrid celebran su gol ante el Liverpool | EFE

Los jugadores del Atlético de Madrid celebran su gol ante el Liverpool | EFE

 

El Atleti de siempre, intenso en defensa, cerrando los espacios y buscando su oportunidad al contraataque; irá a Anfield con una mínima ventaja, y sobre todo, después de conseguir no recibir ningún gol en casa. Un dato decisivo en este tipo de eliminatorias a doble partido, donde los goles como visitante valen doble. 

Los del Cholo no sufieron en exceso ante el todopoderoso Liverpool, que controló por completo la posesión del balón pero no transformó ese dominio en ocasiones claras. Y esto es lo bonito del fútbol, su capacidad de ser imprevisible. Los colchoneros, protagonistas de una temporada muy floja donde no están siendo capaces de dar la talla en la Liga ni en la Copa del Rey, renacieron de sus cenizas. Vencieron a un Liverpool que solo había perdido un partido este curso, y ya sueñan con dar la campanada en tierras inglesas y luchar por el único premio que les queda este año: la Champions.