La destitución de Ernesto Valverde ha sorprendido a todo el mundo del fútbol. No es común que un equipo como el FC Barcelona se desprenda de su entrenador a mitad de temporada. Menos aún teniendo en cuenta que el conjunto azulgrana marcha líder de la Liga y se clasificó con holgura para octavos de final de la Champions League.
La derrota contra el Atlético de Madrid en la Supercopa de España, con cierto aroma a Anfield y Roma, precipitó los acontecimientos. El club se puso en busca de un nuevo técnico, algo que provocó las reacciones de exentrenadores del FC Barcelona como Pep Guardiola o Luis Enrique, que se mostraron bastante críticos con la situación que vivía el Txingurri.
Dardo
El último en opinar sobre el adiós de Valverde ha sido Robert Moreno, ahora en el Mónaco. Preguntado por lo que había sucedido, el preparador catalán aprovechó para reavivar la guerra con Luis Enrique que acabó con su salida de la selección: "A mí ya no me sorprende nada en el mundo del fútbol. Nada de nada".
Robert Moreno en un entrenamiento del Mónaco / EFE
Robert Moreno en un entrenamiento del Mónaco / EFE
Por si alguien no había entendido que con esa respuesta se refería a su repentina destitución de la selección española, Moreno aclaró que "yo soy un ejemplo. Nada me sorprende". Así, cuando la guerra parecía terminada, Robert la reavivó. Habrá que ver si recibe contestación por parte de Luis Enrique.
Más críticas
El técnico leridano no fue el único antiguo seleccionador que habló de lo que ha vivido Ernesto Valverde. También lo hizo Vicente del Bosque, y fue aún más crítico con el despido del extremeño: "No soy quién para juzgar la actuación de los que tienen que gobernar en un club. Sí me sabe mal, sobre todo por una persona como él. Es un ejemplo de comportamiento que representa muy bien los valores de los entrenadores".
Además, el salmantino ha lamentado que "se están produciendo más ceses de entrenadores en lugares donde no estábamos acostumbrados a verlo, lo estamos viendo en el fútbol inglés, donde los entrenadores tenían más crédito y credibilidad que aquí".
Si bien su cese ha sido bien recibido por gran parte del barcelonismo, sus colegas de profesión coinciden en señalar que su destitución es, cuanto menos, extraño. El tiempo dirá si ha sido un acierto o un error.