Mientras el Barça sigue con paso firme en Liga y Champions League, hay jugadores propiedad de los culés que tienen grandes dudas sobre su futuro. Uno de ellos es Philippe Coutinho, cedido al Bayern de Múnich hasta junio de 2020. Los bávaros se guardan la posibilidad de ejercer la opción de compra.
Si el coloso alemán quiere al brasileño deberá abonar 120 millones de euros. El jugador tiene contrato con los catalanes hasta 2023 pero tiene claro que no quiere regresar al Camp Nou. Este domingo explicó en un acto público que su intención es seguir en el equipo el próximo curso.
“Me siento muy cómodo. Mis planes pasan por quedarme aquí un año y me concentro en ello, pero si todo encaja me gustaría quedarme”, comentó ante las peñas bávaras. Estas palabras llegan en un momento en que Coutinho ha perdido la titularidad y ya no es clave para el entrenador.
Coutinho jugando con el Bayern de Múnich el pasado fin de semana / EFE
Con el croata Niko Kovac era un indiscutible, pero con la llegada de Hansi Flick es carne de banquillo. De los cinco partidos con el alemán, ha salido de inicio solamente en dos ocasiones. El brasileño lleva 18 partidos con el Bayern de Múnich y suma tres goles y cinco asistencias.
Busca un traspaso
El jugador puede firmar con los alemanes si pagan los 120 millones de euros de cláusula de recisión. “Hemos entendido bien su manera de entrenar y de jugar. Las cosas están saliendo bien por eso. Flick hace sentir a todos importantes. Estamos contentos pero conscientes de que hay mucho trabajo por hacer”, comentó Coutinho recientemente sobre su nuevo míster.
Aunque el brasileño cuenta con el aval de Muller y Lewadowski, dos de los capitanes del equipo, los dirigentes del Bayern no quieren hablar ya de un posible traspaso. El máximo responsable del club, Karl-Heinz Rummenigge explicó recientemente que “lo decidiremos cuando llegue el momento”. Todo abierto.