Este miércoles se presentó Luis Enrique como nuevo seleccionador de la Roja. El entrenador compareció en Las Rozas junto a José Francisco Molina y Luis Rubiales con una gran expectación mediática. Primeramente, el asturiano agradeció el apoyo de la RFEF por volver a confiar en él.
Después entró en el foco de la polémica, la destitución de Robert Moreno, quien fue su segundo en la Roja y anteriormente en el Barça. “Vuelvo a terminar un proyecto que yo empecé. Me veo obligado a dar más explicaciones de las que me hubiera gustado”, empezó el discurso del entrenador.
Su relación con Robert Moreno
“Esa polémica esta generada por una persona que trabajó conmigo durante muchos años. Me he puesto en su punto de vista”, empezó Luis Enrique. También explicó que “el único responsable de que Robert Moreno no este en mi staff soy yo. Entiendo que fue desleal conmigo”.
Robert Moreno y Luis Enrique en un entrenamiento de la Roja / EFE
Explicó como se rompió la relación con su segundo con un “el desencuentro con Robert viene el día 12 de septiembre. Me llama y tenemos una reunión. Me confirma que él quiere hacer la Eurocopa y luego ya volvería a ser mi segundo entrenador. Le contesto que ya no estará en mi staff”. El segundo de la Roja será Jesús Casas y también se incorpora a su staff Aitor Unzué, hijo de Juan Carlos Unzué que asumirá el rol de tercer entrenador, junto al preparador físico Rafel Pol y al psicólogo Joaquín Valdés.
También añadió que “siendo sincero tengo que decir que lo entiendo. Entiendo que quiera ser seleccionador, que es ambicioso y es la oportunidad de su vida. Pero para mi es desleal, no quiero nadie de esas características en mi staff. Entiendo su posición, pero jamás la comparto. La ambición desmedida para mí no es una virtud, es un gran defecto”.
“No soy el bueno de la película, pero el malo tampoco”, comentó para sentenciar el tema. También dejó claro que su relación de amistad con el catalán está actualmente rota aunque valoró muy positivamente su trabajo en el cargo, clasificando a la selección sin ninguna derrota.
Su regreso
Luis Enrique estuvo muy motivado para afrontar el nuevo reto y competir la Eurocopa. “No habrá muchos cambios. Entiendo que pueda haber morbo por los cambios, pero seguro que los habrá. Me encantaría tener un once de memoria, pero no es la situación que tenemos ahora”, añadió.
Molina, Luis Enrique y Rubiales en Las Rozas / EFE
Otro de los temas que trató fue como se forjó su regreso. “Quiero que quede claro que nunca me ofrecí a la Federación. Nunca he llamado a la Federación, al presidente ni a nadie para ofrecerme. Me mantuve al margen y pasando el tiempo con la familia”, explicó.
“Me llamaron, tenemos una reunión muy agradable, en Zaragoza. Después de esa reunión les dije a Molina y a Rubiales: ‘estáis exentos de cualquier compromiso que creías que tengáis conmigo’”, pero finalmente la cúpula de la RFEF expresó su deseo de verlo de regreso y así lo hizo.