Doce años después, el Barça vuelve apostar por una nueva versión de los Cuatro Fantásticos en la delantera, al contar con Messi, Suárez, Griezmann y Dembelé. Un hecho que recuerda a la estrategia utilizada por el club en el año 2007, cuando a las figuras de Eto’o, Ronaldinho y Messi se sumó la de Thierry Henry.
Sin embargo, la primera experiencia no fue del todo satisfactoria para el conjunto culé. El en aquellos momentos entrenador azulgrana, Frank Rijkaard, prácticamente no pudo hacer coincidir a las cuatro estrellas en el campo en todo el curso a causa de la enorme cantidad de lesiones y el equipo acabó la temporada sin levantar un solo título.
De momento, en lo que llevamos de curso, Valverde tampoco está consiguiendo que los cuatro futbolistas encajen perfectamente en el terreno de juego. De hecho, por un motivo o por otro, las cuatro piezas más importantes en la delantera culé todavía no han coincidido en el campo juntos esta temporada.
Siguiendo los pasos del 2007
La primera versión de los cuatro fantásticos solo coincidieron en una convocatoria en 4 de los 58 partidos del curso 2007/2008. Y no llegaron a jugar nunca juntos. Henry sustituyó a Messi dos veces y ese cambio a la inversa se produjo una vez. Por otra parte, Eto’o relevó a Ronaldinho una vez.
Pero lo más increíble de aquel curso es que, pese a contar con a priori una de las mejores delanteras de la historia del club; finalmente el técnico holandés tuvo que echar mano de Giovanni dos Santos y promover el ascenso de Bojan Krkic, que supuso la mejor noticia de la temporada, para poder afrontar con garantías todos los encuentros del curso.
Así, por culpa también de las lesiones que han sufrido este curso Dembelé, Messi y Suárez; la versión 2.0 de los Cuatro Fantásticos tampoco han llegado a estar juntos en un terreno de juego. De hecho, Ernesto Valverde ha tenido que apostar también por Carles Pérez y la gran revelación de este inicio de curso, Ansu Fati, para ayudar al equipo en los primeros encuentros.
El Barça se marchó con las manos vacías en la temporada 2007/2008 pese a contar con Messi, Henry, Ronaldinho y Eto’o en la delantera. Doce años después, la afición blaugrana solo espera que al club no le vuelva a salir mal por segunda vez la misma estrategia. De momento, van por el mismo camino. Pero aún están a tiempo de solucionar sus diferencias y convertirse en la versión correcta para el Barça de los Cuatro Fantásticos.
Los franceses, un año tarde
Es importante destacar que tanto Henry en 2007, como Griezmann en 2019, llegaron un año tarde a su cita con el Barça.
El acuerdo Barça-Henry estaba fraguado en el 2006, pero Titi quiso quedarse un año más en el Arsenal para aliviar la depresión de los gunners tras haber perdido la final de la Champions contra el Barça en París (1-2) con un jugador más. Henry se sintió culpable porque pudo sentenciar el partido varias veces, pero se encontró con un espectacular Víctor Valdés y el once azulgrana remontó.
En el caso de Griezmann, el delantero fue protagonista en 2018 al publicar un documental donde anunciaba su amor por el Atlético de Madrid y que no se movía del equipo colchonero. Sin embargo, los malos resultados del conjunto de Simeone, junto a la sensación del propio Griezmann de que el club madrileño se le había quedado ya pequeño, comportó que el francés grabase un nuevo vídeo un año después. Pero, esta vez sí, anunciando que jugaría de local en el Camp Nou.
Finalmente, Henry acabó convirtiéndose en un jugador muy querido e importante durante los tres años que vistió la elástica azulgrana. Veremos si, pese al difícil comienzo de Griezmann, finalmente el ex del Atleti podrá seguir los pasos de su compatriota y hacer historia en el club culé.
El tridente sí funciona
Tras la debacle de la primera versión de los Cuatro Fantásticos, la directiva culé apostó por un cambio total en la plantilla. Pep Guardiola llegó al banquillo del Camp Nou y decidió que, para cumplir los objetivos, Ronaldinho y Deco no podían seguir en el equipo. Así, la delantera del técnico de Santpedor dejó de ser un cuarteto, para pasar a ser un tridente con Henry, Eto'o y Messi. Una estrategia ofensiva que sí funcionó al conjunto azulgrana.
En el primer curso a las manos de Guardiola, el club culé consiguió su primer triplete de la historia y mostró un estilo de juego poca antes visto. Así, Pep demostró que un equipo no se construye a través de muchos nombres importantes, sinó con una buena cohesión entre el grupo y ser fiel a una idea de juego.
Esta temporada, Valverde se enfrenta al reto mayúsculo de superar a Guardiola y conseguir formar un equipo campeón con una delantera formada por cuatro jugadores de primer nivel mundial. Solo el tiempo dirá si está nueva versión de los Cuatro Fantásticos acaba funcionado al Barça.