No es ningún secreto que Antoine Griezmann guarda auténtica devoción por los videojuegos. Como sucede a otras muchas personas, son su recurso para desconectar del mundo real, entretenerse y evadirse del trabajo durante unas horas. El delantero francés ha exhibido en más de una ocasión su pasión por las consolas en sus redes sociales.

Y también sobre el terreno de juego. Hace algo más de un año, cuando aún militaba en el Atlético de Madrid, celebraba sus tantos realizando el famoso baile Take the L del videojuego en línea Fortnite.

Griezmann celebra un gol con el Atlético de Madrid / EFE

Griezmann celebra un gol con el Atlético de Madrid / EFE

Como no podía ser de otra manera, Grizou es también muy aficionado de los simuladores de fútbol. Hace unos meses compartió en su cuenta de Twitter una captura de su equipo en Football Manager. Según reveló Ousmane Dembelé hace unos días, es también un gran jugador de PES, patrocinador oficial del FC Barcelona.

Castigado

Otro de sus juegos favoritos es el FIFA. O, mejor dicho, lo era. Griezmann acostumbraba a jugar de forma asidua al videojuego de Electronic Arts hasta que sufrió un incidente, revelado hace tan solo unos días por TheBoi, uno de los trabajadores de la compañía con sede en Vancouver.

El mencionado trabajador señaló en su cuenta de Twitter que en FIFA 15 banearon la cuenta del entonces jugador del Atlético de Madrid por compra de monedas en Ultimate Team, algo completamente ilegal. TheBoi recordó que el delantero llamó a las oficinas de la empresa en Francia muy enfadado y le devolvieron los jugadores que tenía en su plantilla.

No corrió la misma suerte con las monedas debido a que las había adquirido de forma ilegal. Perseguir y castigar a todos aquellos jugadores que cometen infracciones dentro del modo de juego Ultimate Team es una de las máximas de Electronic Arts. Estas monedas virtuales solo se pueden adquirir a través del juego, no mediante otras páginas.

Aunque fuera algo completamente banal, Griezmann aprendió con esta medida que, por muy mediático que fuera, si cometía una infracción sería castigado. Recuperó a los jugadores, pero se quedó sin las monedas y se vio obligado a lograrlas a través del juego. Quizás ese sea uno de los motivos que le empujó a pasarse al PES.