El FC Barcelona ya ha superado la crisis que sufrió en el arranque de temporada. Como mínimo, la de resultados. Después de caer contra el Granada de forma alarmante, el conjunto azulgrana ha encadenado cuatro victorias consecutivas tras derrotar a Villarreal (2-1), Getafe (0-2), Inter de Milán (2-1) y Sevilla (4-0).
El resultado cosechado frente al cuadro hispalense no puede ser más engañoso. El marcador indica que fue una victoria cómoda, pero nada más lejos de la realidad. De hecho, los de Lopetegui pusieron al equipo catalán contra las cuerdas en la primera media hora y tuvieron varias ocasiones para ponerse por delante en el electrónico. Afortunadamente para el Barça, Luuk de Jong las desperdició todas.
Una foto de Luis Suárez celebrando su tanto al Sevilla / EFE
Los pupilos de Valverde eran incapaces de poner en aprietos al Sevilla. La presión y el sistema defensivo de los hispalenses anuló a los azulgranas. Hasta que apareció Luis Suárez. Tras un centro de Semedo, el delantero uruguayo se inventó una chilena ante la que Vaclik no tuvo respuesta.
Con ventaja en el marcador, el cuadro catalán empezó a sentirse más cómodo y los goles de Vidal y Dembelé dejaron el encuentro visto para sentencia. El FC Barcelona vivió una segunda parte muy tranquila y se acabó llevando los tres puntos. Algo que quizás no hubiera sido así de no ser por un Luis Suárez que mantiene intacto su olfato cara a puerta.
Segunda vez
No fue la primera vez que el delantero uruguayo se sirve de la chilena para anotar un tanto con la camiseta del FC Barcelona. Lo hizo cuatro años antes, concretamente el 15 de febrero de 2015 en un choque frente al Levante. Era su primera temporada de azulgrana, le estaba costando adaptarse al sistema de juego del equipo y, sobre todo, ver puerta.
El conjunto catalán iba ganando 4-0 gracias al tanto de Neymar y a los tres que anotó Leo Messi. En el 73', también después de un centro desde la izquierda, el charrúa fusiló a Diego Mariño con una chilena con la pierna izquierda. Como frente al Sevilla.
No es un recurso que haya repetido demasiadas veces, pero dos de las pocas ocasiones en que lo ha ejecutado ha dejado dos goles para el recuerdo. Ante el equipo andaluz Luis Suárez demostró, una vez más, que es un delantero insaciable y que por muchos años que pasen jamás perderá ese olfato que tantas alegrías ha dado al FC Barcelona.