La temporada 2019-2020 será clave para el futuro de Ousmane Dembelé en el FC Barcelona. El futbolista francés llegó al Camp Nou hace dos temporadas con la complicada misión de sustituir a Neymar Jr. En su primera campaña encadenó una lesión tras otra y, cuando se recuperó, el curso prácticamente había finalizado.
En su segundo año dio un paso adelante. Fue uno de los mejores del equipo en los meses finales de 2018 y las primeras semanas de 2019. Ante el Leganés, cuando estaba realizando su mejor encuentro hasta la fecha, sufrió una lesión de tobillo. Cuando se recuperó de ésta, le empezaron a azotar los problemas musculares y en ningún momento volvió a mostrar su mejor versión.
Ousmane Dembelé en una acción contra el Chelsea / FC Barcelona
El tercer curso será clave. De su rendimiento y su aportación al equipo dependerá su continuidad. Tendrá más competencia que nunca por la titularidad con Griezmann, Luis Suárez y Leo Messi pero debe mostrar lo que tanto se espera de él: implicación, desborde, regate y mejores decisiones en los metros finales.
En catalán
Lejos de rendirse, Dembelé ha aceptado el desafío. Regresó antes a los entrenamientos y en los duelos de pretemporada se le ha visto muy participativo y voluntarioso, aunque sin acierto a la hora de decidir. Muestra de su implicación, tras el partido del Gamper compartió una fotografía en Instagram en catalán, algo que se puede interpretar como un gesto a la afición.
"Gràcies Camp Nou! Segur que serà una gran temporada! Tots junts sempre! Força Barça" (¡Gracias Camp Nou! ¡Seguro que será una gran temporada, todos juntos siempre! ¡Força Barça!). Un mensaje que recibió las respuestas de sus compañeros Sergi Roberto ("muy bien este catalán") y Carles Aleñá, que en la línea de su compatriota apuntó: "Buen catalán, Ous".
Se jugará su futuro sobre los terrenos de juego, pero estos gestos evidencian el deseo que tiene Dembelé de triunfar vestido de azulgrana. Si en anteriores años se le había recriminado su falta de actitud, ese aspecto este año está siendo impecable.