La Masia ha destacado siempre por ser uno de los mayores surtidores de talento de toda Europa. Año tras año, el FC Barcelona sacaba una nueva promesa de sus categorías inferiores. De Guardiola hasta Messi, pasando por Xavi, Piqué o Iniesta, entre otros. Los futbolistas más importantes en la historia del club procedieron del fútbol base.
La cantera lo sostiene todo. O así lo hacía antes. En la última década son pocos los jugadores criados en La Masia que pueden presumir de haberse establecido en el primer equipo. El último en triunfar como titular fue Sergi Roberto, que debutó en 2010. Jugadores como Marc Bartra o Thiago tuvieron oportunidades, pero ninguno se terminó de asentar.
Hasta el momento, Carles Aleñá ha sido el último futbolista que ha dado el salto. Disputó 27 partidos el pasado curso y es de esperar que la próxima temporada siga con su progresión. El de Mataró es uno de los jugadores más brillantes de la nueva generación de La Masia, aunque sin duda alguna la gran 'perla' de la cantera es Riqui Puig.
Paso adelante
El de Matadepera fue la gran revelación de la pretemporada del pasado verano. Mostró desparpajo, visión de juego y mucho talento para el juego de posición y posesión. Durante la última campaña tuvo ficha del filial, pero jugó tres partidos con el primer equipo, uno de Copa y dos de Liga, en los que dejó muy buenas sensaciones.
Una foto de Riqui Puig durante un partido del Barça / Twitter
Una foto de Riqui Puig durante un partido del Barça / Twitter
A Valverde le gusta mucho y por eso se lo llevará a la gira japonesa junto a Iñaki Peña, Araujo, Jaime, Busquets, Monchu, Collado, Carles Pérez e Hiroki Abe. El extremeño confía en su progresión y ve en él a un futbolista que puede ser capital en el FC Barcelona, pero antes de darle más oportunidades con el primer equipo necesita que Puig dé un paso adelante con el filial.
Es decir, que se ponga el equipo a la espalda, que se valga de su talento para liderar al equipo. Debe asumir galones y, si lo hace, le demostrará al técnico que está preparado para dar el último paso de su formación. Más allá del liderazgo, Riqui debe mejorar en una de las facetas más importantes de este deporte: el gol.
Tarea pendiente
El pasado curso disputó 32 partidos con el filial (y otros tres con el primer equipo) y no anotó ni un solo tanto. Llevó la manija del centro del campo, creó muchas ocasiones de gol para sus compañeros, trabajó en la recuperación... pero no pudo marcar. Si mejora su incidencia en el juego en los últimos 20 metros, tendrá mucho ganado para triunfar en el primer equipo.
Una foto de Riqui Puig durante el partido ante el Celta de Vigo / FCB
Una foto de Riqui Puig durante el partido ante el Celta de Vigo / FCB
Tener gol es importante, pero no imprescindible. Andrés Iniesta es uno de los mejores futbolistas de la historia del club y no destacaba por su facilidad para marcar pese a ser el centrocampista que jugaba más adelantado. El caso del actual jugador del Vissel Kobe puede servir de ejemplo a Riqui Puig (y a Valverde) para triunfar.