André Gomes puso fin a su carrera de azulgrana el pasado 25 de junio después de que Everton y FC Barcelona llegaran a un acuerdo definitivo para el traspaso del jugador. Tras una temporada cedido al conjunto inglés, la dirección deportiva toffee convenció al portugués para que recalara definitivamente en Liverpool pese a las ofertas que tenía sobre la mesa de otros clubs.
Una operación que dejó 25 millones de euros en las arcas azulgranas y que acabó, definitivamente, con la pesadilla del internacional luso desde que se convirtió en jugador del Barça. Tras una primera temporada regular, su segundo año de azulgrana acabó con un Gomes incapacitado mentalmente para jugar dada la presión que se puso a sí mismo y que confesó en una entrevista a Panenka cuando todavía militaba en el Camp Nou. Un episodio que no olvida y que reconoció en rueda de prensa en su presentación como jugador en propiedad del Everton. Cuestionado por ello contestó: "Creo que también fue por la presión que me estaba ejercitando, una presión de la que no podía deshacerme. Quería más, más y más y probablemente fui por el camino equivocado, pues era algo malo para mí mismo", confesó.
Agradecido
Su figura fue duramente criticada por el barcelonismo y semanas después de confesar sus problemas psicológicos, cuando terminó la temporada, puso rumbo al Everton como cedido. Un club del que ahora es jugador en propiedad y en el que espera triunfar. En la misma rueda de prensa, quiso pasar página definitivamente para centrarse en su futuro en la Premier, aunque también reconoció no arrepentirse de su paso por el club catalán: "Claro que Barcelona fue muy importante para mí en todos los aspectos. Jugué con los mejores del mundo como Iniesta, Messi, Busquets... Me alegro de haber estado en el Barcelona".
Ahora, celebra la oportunidad que le brinda el Everton para reencontrarse. “Fue como un nuevo comienzo, la gente me dio la confianza de venir y disfrutar de mi juego, eso es lo que traté de hacer", afirmó. Un objetivo que cumplió con creces esta temporada bajo las órdenes de su compatriota Marco Alexandre Saraiva da Silva y que intentará repetir esta temporada.