La celebración de un título es uno de los momentos más felices en la carrera de un futbolista. No solo por el ambiente festivo, sino porque significa que todo el trabajo que has realizado durante un determinado periodo de tiempo ha dado sus frutos.
Todas estas sensaciones las experimentaron los futbolistas del FC Barcelona el pasado sábado tras ganar al Levante y conseguir la Liga. El conjunto azulgrana mantuvo un gran nivel durante toda la temporada y sus principales rivales, Atlético de Madrid y Real Madrid, no le pudieron seguir el ritmo.
Fue una noche especial para los futbolistas franceses del equipo. Más allá del título, todos tenían sus motivos para estar especialmente felices. Ousmane Dembelé, si bien ya ganó títulos en su primera temporada, ha sido en esta segunda cuando ha sido verdaderamente protagonista.
Sí que fue el primer gran título en la trayectoria de Clément Lenglet y Jean-Clair Todibo. El exsevillista, aunque empezó el año siendo suplente, se vio beneficiado por la lesión de Samuel Umtiti y se ha hecho con el puesto de titular. Por lo que respecta al francoguyanés, llegó en invierno como un fichaje de futuro y el tiempo dirá si es apto para ocupar la zaga azulgrana. Esta Liga ya no se la quitará nadie.
También tenía motivos para estar contento Samuel Umtiti. El central ha sufrido un auténtico calvario con su rodilla izquierda que le ha privado de tener la continuidad que deseaba. Ahora su futuro en el club catalán está en el aire.
La alegría típica brasileña
El otro grupo numeroso dentro del vestuario del FC Barcelona es el brasileño. Para dos de sus integrantes, Malcom Oliveira y Arthur Melo, fue su primer gran título como culés, y no dudaron en celebrarlo en sus respectivas cuentas personales de Instagram.
Otro de los cariocas de la plantilla es Rafinha. Desafortunadamente, el brasileño cayó lesionado en noviembre y no ha podido participar durante el resto de la temporada. Lo que no fue un impedimento, evidentemente, para que celebrara el título.
Y el brasileño más emblemático del primer es Philippe Coutinho. El brasileño, que ha estado muy lejos de su nivel a lo largo del curso, parece que en los últimos partidos está recuperando su mejor versión. Ayer celebró con su esposa y sus hijos el título sobre el verde del Camp Nou.