El Santiago Bernabéu ya sabe de lo que es capaz Frenkie de Jong. El holandés dio una auténtica exhibición en el feudo blanco y fue uno de los grandes artífices de la clasificación del Ajax para cuartos de final de la Champions League. El futuro jugador del FC Barcelona dominó los tempos del partido a su antojo y demostró una gran calidad para sacar el balón y empezar todas las jugadas del cuadro 'ajacied'.
Uno de los espectadores de lujo del recital del 21 fue Sergio Ramos, que disfrutó del encuentro desde un palco personalizado en el que se grabó su documental. El camero forzó la tercera tarjeta amarilla de la competición en el Johan Cruyff Arena con el objetivo de limpiarse de cara a cuartos de final. La jugada no le salió bien, pues el Real Madrid no estará en dicha ronda y además el capitán se perderá el primer partido de la siguiente edición debido a sus declaraciones en la zona mixta.
El madridista reconoció haber buscado la cartulina para poder estar en cuartos de final, pues daba por hecho que el 1-2 de la ida era una renta suficiente para el conjunto blanco. De Jong no pensaba así, y ya avisó al andaluz hace unos días: "Igual Sergio Ramos se arrepiente de haber forzado una tarjeta amarilla en Amsterdam".
Dicho y hecho. Forzar la tarjeta fue un acto irresponsable teniendo en cuenta que el Ajax ya fue superior en Holanda y solo el gran trabajo de Sergio Ramos evitó la debacle. Se perdió el duelo del Bernabéu y el Real Madrid recibió cuatro goles.