¡Campeones de Copa! El FC Barcelona Lassa se llevó su 25º título de la Copa del Rey en una final ajustada con un desenlace agónico, en la prórroga, marcado por unas vergonzosas decisiones arbitrales que a punto estuvieron de dejar a los blaugranas sin el título.
A falta de 10 segundos, los árbitros no pitaron una falta clarísima de Randolph sobre Singleton que metió al Madrid en la final nuevamente cuando iba dos puntos abajo y con esa falta los azulgranas hubiesen tenido dos tiros libres a favor para poderse poner a cuatro. En cambio, Carroll aprovechó la situación para hacer un 2+1 que dejaba a los blancos uno arriba tras convertir el tiro libre a falta de cuatro segundos. Y en esos cuatro segundos Tomic forzó un dudoso tapón ilegal que sí concedieron los árbitros y garantizó la Copa en Madrid (93-94).
Antes, el intratable Sergio Llull estuvo a punto ser el héroe de la final ya que forzó la prórroga con una canasta milagrosa a falta de cuatro segundos. El mallorquín asumió la responsabilidad y empató un duelo tremendamente igualado.
Llulll fuerza la prórroga
En la prórroga, el Madrid empezó más concentrado. Los azulgrana perdieron algún balón, fallaron algún tiro libre y en partidos de semejante enjundia, esos pequeños detalles pueden pagarse caros. Sin embargo, una vez más los de Pesic sacaron fuerzas de flaqueza.
La igualdad fue máxima en el luminoso hasta el final. Punto arriba punto abajo hasta que a falta de 40 segundos Tomic silenciaba al Wizink Center con un mate espectacular que ponía a los de Pesic con ventaja de tres puntos. Como respuesta, Campazzo probó un triple que no entró y parecía terminar con las aspiraciones blancas. Pero hubo más. Dos tiros libres de Singleton aumentaban la renta a cinco, pero un triple de Randolph volvía a reducir las diferencias a solo dos puntos.
Sergio Llull, protagonista del Real Madrid en la final de la Copa del Rey / EFE
Cuando solo faltaban unos 10 segundos los árbitros se convirtieron en protagonistas y estuvieron a punto de estropear el espectáculo. La clamorosa falta de Randolph a Singleton debió ser antideportiva ya que el ala-pívot estadounidense golpeó la cabeza del jugador azulgrana. Y luego, como por justicia divina, los propios árbitros compensaron la situación señalando un discutible tapón ilegal a favor de Tomic.
Heurtel, MVP
El partido fue reñido, aunque con sensación de superioridad azulgrana en el primer tiempo. Ambos arrancaron pacientes, estudiando al rival y llegaron igualados al descanso (35-35) sin demasiado acierto por ninguna de las dos partes. En el tercer cuarto, en cambio, los blancos estuvieron a punto de romper el partido al sacar una diferencia máxima de 17 puntos (58-41) tras un parcial de 13-0. Movidos por su afición, los de Pablo Laso parecían encarrilar la final pero los blaugrana reaccionaron con cuatro triples consecutivos y guiados por un Thomas Heurtel (22 puntos) que fue clave para poner el empate a 61 y terminó siendo nombrado MVP de la Copa.
Pierre Oriola no dejó de animar a sus compañeros en la final de la Copa del Rey de baloncesto / EFE
A partir de ese momento, tornas igualadas y recta final blaugrana hasta ese agónico desenlace en la prórroga forzada por Llull. Fue clave el buen hacer de otros jugadores como Claver (15), Tomic (14), Kuric (12), Pangos (10) y Singleton (18 puntos de valoración). Por parte de los blancos, los mejores fueron Ayón (12 puntos y 21 de valoración), Campazzo (19 puntos), Randolph (16), Causeur (14) y el propio Llull (13).
Una gran noticia en clave azulgrana que confirma el espíritu ganador de este Barça de Pesic, capaz de lograr el cetro copero dos años seguidos. Ahora, a mantener la buena dinámica hasta final de curso en la Liga ACB y la Euroliga.
Thomas Heurtel y Ante Tomic en el centro de la celebración del Barça con la Copa del Rey / EFE