El filial del Barça sube fuerte aunque pocos llegan a donde les gustaría. El último jugador en dar el salto de la Masía al primer equipo fue Carles Aleñá que aprovechó una lesión de larga duración de Rafinha para tener ficha con Leo Messi y compañía.
Las oportunidades a los jóvenes los últimos años han dejado mucho que desear. Luis Enrique no apostaba por el filial como tampoco lo hace Ernesto Valverde. El actual entrenador del Barça tenía buenos antecedentes en el Athletic Club, un club que depende de los éxitos del filial, pero una vez llegado a Barcelona su confianza con la Masía ha sido mínima.
Hasta el momento han debutado Riqui Puig, Juan Miranda, Chumi y Cuenca. Todos ellos jugaron la eliminatoria de la Cultural Leonesa y, excepto Chumi y Juan Miranda –titulares en la ida en el Ciutat de València–, no han vuelto a entrar en los esquemas del entrenador. Los técnicos del filial siguen a lo suyo. Continúan formando a jugadores para algún día abastecer al primer equipo.
El futuro del Barça B
El Juvenil A de Denis Silva tiene una plantilla muy trabajada en que destacan grandes figuras que pueden dar el salto –como ya hizo el juvenil Miranda– el curso que viene al Barça B de García Pimienta. En los últimos partidos cuentan con el potente Ilaix Moriba, una de las joyas que despertaron el interés de grandes clubes extranjeros como Manchester City y Chelsea.
El club catalán finalmente pudo atar al centrocampista de 16 años que ya juega con el equipo juvenil aunque por edad le correspondería una categoría inferior. Tal es su influencia en este conjunto que en el fin de semana, contra el Europa, Ilaix marcó el único gol del Barça (0-1) en un complicado partido. Esta victoria acerca a los culés (48) al Espanyol, líder de la liga con 49 puntos.
Dos de las promesas que pueden ser en un futuro grandes piezas de los culés son Anssumane Fati y Nico González. El delantero de Guinea-Bissau es uno de los mayores referentes de la División de Honor juvenil. Suma once goles en los que llevamos de liga y ya ha debutado con el Barça B y en la UEFA Youth League. Puede jugar tanto de delantero centro como caído en banda. Su potencia y buen control del balón lo hacen ser un fijo de los esquemas de Denis Silva.
El partido de Nico González contra el Espanyol
Nico González apunta a ser uno de los centrocampistas de referencia en los próximos años. En su casa tiene un gran modelo a seguir. Su padre es Fran González, leyenda del Deportivo de la Coruña y uno de los centrocampistas con mejor toque de las últimas décadas en Primera Divisón. A sus 17 años es un gran controlador del juego y capitán de sus equipos. Un auténtico líder como su progenitor.
Los extremos que vienen
Como ya pasó en la época Guardiola con Cristian Tello, Isaac Cuenca, Adama o Gerard Deulofeu, los catalanes son una fábrica de producir especialistas en banda. Si pensamos en extremos prometedores nos viene a la mente jugadores como Raúl Moro del Juvenil B.
El joven de Abrera fue fichado del Cadete A del Espanyol el pasado verano. Se trata de un desequilibrante extremo diestro que se siente bien jugando en ambas bandas aunque su sitio favorito es el perfil derecho del ataque. A sus 16 años ya es internacional con España Sub-17.
Cinco grandes goles de la cantera del Barça
Jaume Jardí, como Moro, es otro de los extremos más desequilibrantes del equipo de Fran Artiga. Sus registros goleadores –14 tantos de Jardí y 13 de Moro– ayudan a los culés a mantenerse líderes del Grupo 7 de la Liga Nacional Juvenil justo por delante de la Damm. Se les avecina un gran futuro por delante.
Control y toque asegurados
El centro del campo culé de los próximos años –y de siempre– pasa por el toque y el control. Por ese motivo, la secretaría técnica apuesta por Frenkie de Jong. Un fichaje por el que peleaban media Europa mientras Riqui Puig, un chico de la casa, sigue haciendo méritos en Segunda División B.
Dos perfiles parecidos al centrocampista del Barça B son Txus Alba y Pablo Páez, jugadores cadetes de la Masía. El primero desarrolla su juego al estilo Busquets, bien posicionado y al primer toque. El segundo es más desequilibrante, especialista en el último pase y con peligrosas llegadas al área. El control del juego y la madurez futbolística están en su ADN desde bien pequeños.
Pablo Pérez, una de las grandes promesas del Barça
Arnau Prades es, a pesar de su juventud (13 años), uno de los jugadores de banda que más dará que hablar. Su pierna hábil es la izquierda y ya es uno de los especialistas de la banda de Jordi Alba. Puede jugar tanto de lateral o carrilero izquierdo como de interior. Su visión de juego y sus peligrosas internadas en área rival lo hacen ser uno de los más destacados del Infantil B.
La cantera del Barça sigue haciendo el trabajo habitual aunque las oportunidades del primer equipo cuestan en llegar. Sergi Roberto (27 años) es el último canterano en asentarse como titular en el primer equipo reconvirtiéndose de interior a lateral derecho. No es de extrañar que, viendo los pocos que triunfan, cada vez sean más –como Bellerín (Arsenal) en su día o Abel Ruíz (Borussia Dortmund) recientemente– los que ven con buenos ojos una salida de Barcelona en busca de un futuro más prometedor.