Diego Armando Maradona sigue intentando reparar el error tras las desafortunadas declaraciones que le enfrentaron con el entorno de Leo Messi. El Pelusa habló desde México en una entrevista con el diario Marca. Remarcó sus muestras de cariño hacia el astro azulgrana e insistió en negar la realidad. Porque a su entender jamás dijo lo que dijo sobre Messi. No al menos en el sentido evidente que se desprendía de sus palabras.
“Leo es amigo mío y yo jamás voy a hablar mal de un amigo. En todo caso, se lo digo en la cara. No se lo mando a decir por una entrevista. De Leo digo que es un fenómeno y nada más. Y que había jugadores que iban 20 al baño, pero nunca me referí a Messi”, se excusó Maradona.
Refuerza su versión
El Pelusa recurrió al Mundial de Sudáfrica 2010, cuando él era seleccionador de Argentina, para reforzar su versión: “Lo que quería Leo era cambiarse rápido, salir a la cancha y buscar el balón, cosa que muchos otros no hacían. Se escondían del balón”.
Aunque fiel a su estilo, Maradona no pudo evitar señalar a otros jugadores mientras salvaba a Messi: “Tras el 4-0 contra Alemania yo le vi llorar en el vestuario... y le digo más, y que se enoje quien se enoje: hubo jugadores en el Mundial 2010 que aquel día ya habían sacado pasaje para Argentina. Y eso Lío no lo hizo. Lío es un hombre de códigos, y por eso lo escuché llorar en la ducha”, añadió.
Amor incondicional
Maradona insistió en el amor que profesa por Messi: “A Leo lo adoro. Quiero darle un abrazo muy grande porque hace mucho tiempo que no lo veo”. También mandó un recado a quienes, según él, insisten en enfrentarlos a los dos: “Yo estoy... no cansado, pero sí quiero decirle a esta gente que dice eso que lo mío con Leo es incondicional”.
Es más, Maradona criticó abiertamente la actitud de la prensa del Barça: “Desde que Messi juega en el Barcelona nos quieren hacer pelear permanentemente. No sé por qué tienen esa obsesión conmigo y él. Vos sabés cómo son los diarios de Barcelona, siempre van a querer que nos peleemos, pero yo me como un asado con Leo, jugamos un tenis-fútbol y somos felices”, afirmó.
Leo Messi y Diego Armando Maradona compartieron vestuario con Argentina en el Mundial de 2010 / ARCHIVO
Como buena parte de la afición argentina, el Pelusa confió en que Messi vuelva algún día a la Albiceleste: “Tendrá que volver, porque si no, estamos en el 'horno'. No tenemos un jugador que tire una pared... pero por ahora que descanse”.
Puñalada a Solari
Hacia el final de la entrevista, Maradona le mandó un recado a Santiago Solari, el flamante nuevo entrenador del Real Madrid, a quien comparó con Scaloni en Argentina: “En ambos casos no tienen espaldas para soportar semejantes equipos. Pero bueno, si los pusieron ahí fue por decisión del presidente de AFA y del presidente del Madrid, pero no creo que duren mucho. Los técnicos deben ir quemando etapas y ellos nos las quemaron”, afirmó.
El Pelusa, en cambio, sí se consideró a sí mismo capaz de conducir el banquillo blanco: “Me sobran espaldas para ello. Pero bueno, las cosas se dieron así. Hoy estoy en Dorados y soy feliz”. Toda una oda a la humildad. Claro que siempre podrá desdecirse de lo que dijo.