Luis Enrique dio su tercera lista al mando de la Selección Española con la misma expectación que la primera y la segunda. El técnico asturiano no defraudó y volvió a revolucionar una Roja que tiene muy pocos fijos y destaca por sus rotaciones. Parece ser que Lucho quiere dar oportunidades para todos y todavía no ha encontrado a los 25 elegidos para defender la elástica nacional.
En su particular proceso de rehacer una selección de capa caída desde 2012, el retorno de Jordi Alba al combinado nacional acaparó todas las miradas, pero hay mucho más allá del lateral. A diferencia de anteriores convocatorias, la crisis blanca ha pasado factura a la Roja. El mal juego del equipo blanco, la falta de referentes en el terreno de juego y la inestabilidad que se vive en el Real Madrid han salpicado indirectamente a Luis Enrique.
Solo cuarto intocables
Llama la atención que un mes después del último parón de selecciones, el entrenador nacional solo haya dado continuidad a cuatro blancos que, de momento, parecen ser casi intocables. Sergio Ramos, Dani Ceballos, Isco y Asensio. Cuatro blancos que han conseguido evitar la quema de Luis Enrique que ha dejado en el camino a Nacho, Lucas Vázquez y Odriozola y al lesionado Dani Carvajal.
Todos ellos estuvieron en el Mundial de Rusia en la plantilla que confeccionó Julen Lopetegui y repitieron convocatoria en septiembre y octubre. Con el cambio de técnico en el club de Chamartín y dados los malos resultados, acompañados de las ausencias o malas puestas en escena de estos jugadores, Luis Enrique ha dado prioridad a clubes menores con jugadores que han dado un paso al frente como Mario Hermoso del Espanyol, Pablo Fornals o Brais.
El Barça, sin muchas diferencias
Tras la ausencia de Sergi Roberto por lesión en noviembre, Sergio Busquets viajará junto a dos compañeros de vestuario. El de Reus también es un indiscutible para Lucho y por fin, regresará Jordi Alba, que además ejercerá de tercer capitán. Tres jugadores azulgrana que aumentan mínimamente la presencia blaugrana en el combinado nacional.
Un equipo que ha recuperado el espíritu ganador, pero en el que todo apunta que se acabó la hegemonía de los dos grandes de España. Barça, con tres jugadores, y Real Madrid, con cuatro, se mantienen como los dos equipos con mayor representación, pero lejos de lo que un día fue.
Lucho ha encontrado talento en La Liga y fuera de ella y volvió a dejar claro que no se casa con nadie.