Diego Armando Maradona vuelve a la carga. El histórico ariete argentino causa un terremoto cada vez que abre la boca. Su lengua es veneno puro. Hasta ahora se había mostrado respetuoso con Lionel Messi en sus declaraciones a la prensa. Incluso había salido al paso de quienes criticaban a la Pulga. Sin embargo, el buen talante del Pelusa ha cambiado.
Puyas a su heredero
Ya nadie escapa a las rajadas de Maradona. Ni siquiera Messi, hasta ahora su protegido. En declaraciones al programa mexicano La Última Palabra, Diego cargó duramente contra la personalidad de Leo, dejando titulares para la polémica. “No endiosemos más a Messi”, afirmó el D10S de Argentina, tal vez receloso de que un nuevo Messías le usurpe el reino de los cielos.
“En la cancha sí la pide, pero antes de hablar con los compañeros se va a jugar a la Play. Para mí es difícil hablar, pero es inútil querer hacer caudillo a un hombre que va 20 veces al baño antes de un partido. Messi es Messi en el Barcelona, y Messi es Messi jugando con Argentina”, espetó el Pelusa, dando a entender que el carácter de su compatriota es débil y dependiente.
Imagen de archivo de Messi durante el Mundial de Rusia 2018 / EFE
Preguntado por qué haría si él volviera a ser el seleccionador de la Albiceleste, Maradona es tajante: “No llamaría a Messi, pero nunca digas nunca. Hay que sacarle presión. Hay que sacarle el caudillo que queremos que sea Messi, que no lo va a ser. A Messi le dices 'tírate de cabeza contra el palo', y él prefiere jugar videojuegos. Haciéndolo jugar como yo quiero, lo llamaría y lo haría jugar como sé que juega Messi”, afirmó.
Una lengua viperina
La viperina lengua de Maradona ya había vilipendiado con dureza a Mascherano recientemente. Le acusaba de no salir en defensa de Messi ante las críticas que este recibe, y a las que él mismo ahora se suma. En términos parecidos criticaba su falta de liderazgo, su carácter endeble. Caudillo es la funesta palabra que parece gustarle al Pelusa.
Maradona sigue fantaseando con la posibilidad de volver a dirigir al combinado albiceleste. “Me falsificaron la firma”, dice al respecto de su salida de la selección. De momento critica a Sampaoli, quien según él “no tiene categoría para llegar a la selección”. Tampoco descarta la opción de entrenar a la selección de otro país: “Me gustaría dirigir a la selección mexicana”, afirmó.