Jordi Alba es amo y señor del carril izquierdo en el Barça. Nadie se atreve a cuestionar su posición. Tampoco hay motivos para ello. El de L’Hospitalet es también el mejor lateral zurdo que la selección española podría tener. En cuanto a rendimiento, no hay quien se le compare. Sin embargo, Luis Enrique es quien ocupa el banquillo de la Roja.
La relación entre Jordi Alba y Luis Enrique no es buena. El seleccionador nacional acabó mal con el lateral azulgrana en su etapa en el Camp Nou. Hasta el punto que se ha negado a convocarle en sus dos primeras listas. Una decisión incomprensible desde el punto de vista futbolístico, pero que se explica por la el desafuero personal entre ambos.
Un secreto a voces
Recordemos que la relación entre Jordi Alba y Luis Enrique se tensó en el tramo final de la última campaña del entrenador en el banquillo del Barça. El técnico asturiano cambió el sistema de juego del equipo, pasando a jugar con un 3-4-3, y Jordi Alba fue el gran sacrificado. La tirantez entre ambos se hizo evidente.
Era un secreto a voces. Todo el mundo sabía que reinaba el malestar entre Jordi Alba y Luis Enrique. Una situación que Aleix Vidal, actual jugador del Sevilla, confirmó en una entrevista para El Desmarque, desvelando cualquier género de dudas que pudiese quedar al respecto.
Jordi Alba y Sergio Ramos felicitan a Isco tras marcar con la Roja | EFE
“¿El caso de Jordi Alba? Tienen una relación complicada y ahora no lo está llevando a pesar de que para mí es el mejor lateral izquierdo que hay en España”, reveló el exjugador del Barça, preguntado por la ausencia de Alba en la lista de Luis Enrique.
La verdadera causa del enfado
Pero hay otro motivo más por el que Jordi Alba está muy cabreado con Luis Enrique. Al de L’Hospitalet la no convocatoria le duele enormemente debido a la imposibilidad de seguir sumando goles en su cuenta anotadora. El azulgrana compite con Sergio Ramos en esta faceta, aunque el último gol del central ante Islandia y la presencia de Luis Enrique en el banquillo le dejan en un imposible.
Jordi Alba suma ocho goles con la selección, mientras que Sergio Ramos ya lleva 15, casi el doble. El central del Madrid se presume ya inalcanzable, pero al azulgrana le gustaría llegar al menos al dobles dígitos. Una decena de goles sería una cifra muy correcta para él, que le permitiría estar entre los defensas más goleadores de la historia de España. Un objetivo que, sin embargo, va a resultar harto complicado mientras Luis Enrique siga en el banquillo de la Roja.