Antoine Griezmann era el elegido por la secretaría técnica del Barça y Ernesto Valverde para acompañar a Messi y Suárez en ataque. La operación del francés estuvo meticulosamente estudiada. El club catalán espero un año para que el Atlético de Madrid cumpliera con la sanción impuesta por la UEFA para entonces hacerse con los servicios del '7'. Incluso llegó a tener el dorsal reservado para su llegada, pero en algún momento los planes de futuro de Antoine cambiaron. 

Su esposa ya había iniciado los trámites para encontrar una residencia cerca de donde viven Messi, Suárez, Coutinho y compañía, habían buscado colegio  para su hija Mia y todo encajaba a la perfección, pero dudó y ante la duda Godín y el Cholo acabaron de convencer al ariete de que su futuro estaba en el Wanda. En Madrid es la estrella y la referencia ofensiva y en el Barça sería un actor secundario a la sombra de Messi. 

Futuro incierto 

Su decisión llegó a televisarse en forma de documental por una empresa propiedad de Gerard Piqué --algo que todavía escuece en la cúpula del club por la falta de información que aportó el central-- y tras rechazar la oferta azulgrana no parece ser que la secretaría técnica del Barça vaya a sufragar su fichaje en cualquier mercado próximo. 

Con su puesto afianzado como 'colchonero', Griezmann ha vuelto a abrir las puertas de su futuro. Quizás no el más inmediato --tiene 27 años y todavía mucho fútbol en sus botas al máximo nivel-- pero el ariete se ha sincerado sobre el fin de su carrera y ya ha elegido destino. El francés no quiere grandes ligas. En España lo tiene todo y la Premier o la Ligue 1 no son opciones reales para sus pretensiones profesionales. 

¿Rumbo a las Américas?

Con el auge del fútbol en Estados Unidos, Griezmann podría encontrar un destino donde recalar y seguir compitiendo al máximo nivel. El mercado chino y japonés, así como tampoco el árabe, no convencen al delantero. Estados Unidos es su destino predilecto donde otras estrellas como David Villa, Andrea Pirlo, Zlatan Ibrahimovic o Wayne Rooney están disputando sus últimos años como futbolistas a un altísimo nivel, aunque en una liga inferior, pero con mucho seguimiento y potencial económico.

El mismo lo dejó claro y mandó un guiño a varios equipos que ya han apuntado su nombre en la agenda para el mercado de fichajes pasados el 2023. "Quiero terminar mi carrera en los Estados Unidos, todavía no sé si será en Miami o en Los Ángeles, son dos grandes ciudades. Me gusta mucho la mentalidad y la cultura del espectáculo que hay en los Estados Unidos". 

La ciudad californiana ya cuenta con un equipo. Los Ángeles Galaxy liderado por el sueco Ibrahimovic. Miami, por su parte, cuenta con el Inter Miami, la nueva franquicia del exjugador David Beckham. Ambos destinos lo tienen todo. Costa, buen clima y son culturas y ciudades más parecidas a la vida en Europa. De momento, la costa este puja más fuerte. "Si Beckham me quiere en su equipo, iré". Un primer guiño a la entidad vista a cinco años. La intención es firme y habrá que ver si finalmente decide recalar en América o hay cambio de planes.