Día histórico para la 'rojita' femenina. La selección española disputa la final del Mundial Sub-20 este viernes frente a Japón en busca del oro. El torneo de La Roja ha sido digno de enmarcar. Una selección que ha madurado y que ha superado a rivales que hace menos de dos años eran impensables. 

La final es el broche de oro para el campeonato de las jugadoras de Pedro López. Un equipo sólido defensivamente y que sabe a lo que juega. Siempre con el baln. El Barça ha aportado a cuatro jugadoras. Patri Guijarro, Aitana Bonmatí y las delanteras Candela Andújar y Claudia Pina recién ascendidas al primer equipo. Las azulgranas vuelven a ser el equipo que más jugadoras proporcionan a la selección, junto al Athletic Club --también cuatro-- y el Atlético de Madrid --tres jugadoras--, los tres clubs referentes en el fútbol femenino español. 

Revancha contra un rival conocido

Muchas de las jugadoras que este viernes disputarán la final saben lo que es perder un Mundial. Especialmente contra Japón. La selección sub-17 ya perdió la Copa del Mundo frente a la selección nipona cuatro años atrás. Carmen Menayo, Maite Oroz y las azulgranas Guijarro y Bonmatí ya conformaban esa plantilla que se topó con el monstruo asiático. Perdieron por dos a cero en un encuentro donde las japonesas demostraron su superioridad. 

Pero las cosas han cambiado. El fútbol femenino español ha evolucionado y la apuesta por este deporte no deja de crecer. La previa favorece a las nuestras. Se toparon con Japón en la fase de grupos, y vencieron por 1 a 0. Un hueso duro de roer. Ambos equipos miman el balón como forma de juego. 

Hoy se cita la historia. Ambos países lucharán por su primera Copa Mundial en esta categoría. España sabe que no será fácil y pese a la victoria cosechada en la fase de grupos las rojitas no están confiadas. 

La capitana, en la grada

La capitana de la selección se perderá un encuentro histórico. Aitana Bonmatí fue expulsada en la semifinal contra Francia por doble amarilla. Un doble problema para La Roja. Su liderazgo y su calidad en el centro del campo son indudables. Además, se perderá su último partido en la selección inferiores. Bonmatí dará el salto a la absoluta en los próximos meses después de que Jorge Vilda la haya convocado para los amistosos frente a Finlandia y Serbia que se disputarán en septiembre. 

Como ella misma dijo: "Jugaré sin botas pero con el alma". Se pierde la final, pero otras 21 lucharán por el título más ansiado del fútbol español femenino. Además, podría ser un buen preludio para el Mundial que se jugará el año que viene en Francia para el que España ya está clasificada por segunda vez en la historia. 

Este viernes 21 guerreras pueden hacer realidad su sueño, y cuatro azulgranas ser campeonas del Mundo.