Empiecen a salir cada vez más novedades del controversial caso de Dani Alves. El pasado viernes 3 de febrero se pronunció por primera vez la supuesta víctima del jugador brasileño, tras comparecer junto a su prima en el juzgado de la Ciutat de la Justicia. Ambas llegaron custodiadas por los Mossos d’Esquadra, con el objetivo de preservar sus respectivas identidades.
Las declaraciones de la joven en cuestión eran esperadas para conocer un poco más acerca de la delicada situación. Algunas de sus declaraciones fueron recogidas por La Vanguardia, que pudo revelar la primera frase en la mencionada comparecencia ante la jueza. Según el citado medio, el exjugador del Barça abandonó el baño de la discoteca Sutton y poco después de lo hizo la denunciante, que se dirigió a su prima para decirlo “nos vamos de aquí”.
La misma fuente asegura que al salir del establecimiento, mientras buscaban sus pertenencias, la joven estalló en llanto y señaló que “me han mucho daño”. Esa versión de la historia fue avalada por las testigos de la situación, que en este caso fueron una de sus amigas y la prima. Del mismo modo, también ha trascendido que la jueza ofreció a una de las testigos la posibilidad de denunciar a Dani Alves, después de de declarar que el brasileño la estuvo manoseando.
La gran novedad del ‘caso Alves’
Una novedad destacable en el caso tiene que ver con unas zapatillas blancas: las que Alves llevaba puestas aquella noche del pasado 30 de diciembre. La defensa del brasileño asegura que en las imágenes de las cámaras de seguridad se puede ver cómo la joven entra dos minutos más tarde al baño del reservado VIP, y por voluntad propia.
Según la joven denunciante, no obstante, el jugador se encontraba en un punto ciego para las cámaras, justo detrás de la puerta de entrada al servicio --de ahí que no se le vea en los vídeos--. En este sentido, sus zapatillas blancas sí que serían visibles en el reflejo de un espejo, lo que haría tambalear seriamente la defensa del futbolista por parte de Cristóbal Martell y sus abogados.