Lionel Messi disfrutó de un fin de semana placido, después de liderar a su selección en el importante triunfo (2-0) contra México. Los festejos del combinado argentino han dado a pie a un montón de reacciones, en especial porque la celebración dentro del vestuario se ha filtrado por las redes sociales. En esa euforia del equipo albiceleste se dio un gesto de La Pulga que ha hecho explotar a uno de los boxeadores mexicanos más reconocidos del panorama internacional, Saúl Canelo Álvarez.
La polémica en cuestión está relacionada a que el capitán de Argentina tuvo un gesto en el que empujó con el pie una de las camisetas mexicanas que estaban en el suelo. Esa situación es lo que ha provocado el cabreo del Canelo, que ha compartido durante varias horas una serie de tuits en amenaza al astro del fútbol sudamericano: “Que le pida a Dios que no me lo encuentre”.
Esa serie de mensajes por Twitter se han hecho virales a lo largo del lunes, a tal punto que el propio boxeador ha entrado en discusión con varios usuarios y periodistas que intentaron demostrar que su reacción ha sido desmedida. A pesar de esto, el mexicano siguió compartiendo más comentarios acerca de la importancia de defender “la identidad” ante el “insulto” que representa tener la camiseta de su país en el suelo.
Agüero y Cesc salen en defensa de Messi
Por ahora, Messi no se ha pronunciado con respecto a las amenazas del boxeador, pero sí ha tenido una respuesta contundente por sus antiguos compañeros de vestuario: Sergio Agüero y Cesc Fábregas. Ambos han decidido citar alguno de los tuits de Saúl Álvarez en defensa del astro argentino.
"Señor Canelo, no busques excusas o problemas, seguramente no sabes de fútbol y qué pasa en un vestuario. Las camisetas siempre después que se terminan los partidos están en el piso por el sudor y después si ves bien hace el movimiento para sacarse el botín y sin querer le da", expresó el Kun.
Mientras que el jugador español y canterano del Barça comentó que “ni conoces a la persona, ni entiendes el cómo funciona un vestuario o lo que pasa después de un partido. TODAS las camisetas, incluso las que usamos nosotros mismos, se van al suelo y se lavan después. Y más cuando celebras una victoria importante”.