El futbolista del Manchester City, Benjamin Mendy, afronta la imputación por siete cargos de violación. El lateral francés ha roto su silencio públicamente durante su defensa en el juicio del Tribunal de la Corona de Chester. De hecho, ha negado rotundamente la existencia de relaciones no consentidas y ha aducido que "no soy Brad Pitt, pero las mujeres se acercaban a mí".
El club de la Premier League mantiene sancionado por más de un año a Mendy. Sobre el jugador de 28 años pesa la acusación por siete violaciones, un caso de intento de violación, y uno de agresión sexual. Si bien ya ha dejado su carrera como futbolista por el proceso judicial, Benjamin todavía se enfrenta a una condena de cadena perpetua.
Niega la acusación
Los delitos habrían tenido lugar en su domicilio de Prestbury, Cheshire, entre octubre de 2018 y agosto de 2021. No obstante, Mendy ha rechazado toda acusación acerca de relaciones no consentidas: "Me gusta acostarme con muchas mujeres. Si ellas querían tener sexo y yo también, todo estaba bien. Si una mujer hubiera dicho 'no', lo habría aceptado y me habría detenido".
Tras estallar el escándalo en agosto de 2021 y prosperar las numerosas denuncias contra Mendy, las fuerzas de la ley encarcelaron al futbolista en prisión preventiva. Allí permaneció cuatro meses hasta enero de 2022. A principios de año pusieron en libertad al jugador para ponerlo en supervisión judicial. Durante los primeros meses del juicio la acusación ha declarado a Mendy como un "depredador que abusaba de víctimas vulnerables, aterrorizadas y aisladas".
Descenso a los infiernos
Desde que alzara el Mundial de Rusia en 2018 con la selección de Francia, la vida de Benjamin Mendy ha sufrido un deterioro irreversible. Se había ganado el favor de todo un país tras la hazaña en la Copa del Mundo. Cuatro años más tarde, precisamente en las cercanías del Mundial de Qatar, se enfrenta a la prisión permanente.
Este descenso a los infiernos contrasta con un inicio de carrera prometedor. Mendy fichó en julio de 2017 por el Manchester City, a cambio de 57 millones de euros. El lateral francés formaba parte de aquel Mónaco que alcanzó las semifinales de la Champions League 2016-17, comandado por Kylian Mbappé.