Callejón sin salida para Shakira. Ya no hay vuelta atrás. La jueza ha enviado a juicio a la cantante colombiana por seis delitos fiscales, en relación a una presunta evasión de IRPF e impuesto de patrimonio entre los años 2012 y 2014. El auto se ha dado a conocer este martes, y la artista ya no tiene opción alguna de recurrirlo. La Fiscalía solicita una pena de ocho años y dos meses de cárcel, además de una multa de 23,8 millones de euros para paliar la media docena de delitos fiscales presentes en la acusación.
Cabe recordar que, en los últimos meses, Shakira rompió las negociaciones para alcanzar un acuerdo. Ahora, lo está pagando caro. Si bien es cierto que la posibilidad de un pacto está abierta hasta el día del juicio, ya nada evitará que la cantante se vea envuelta en un proceso judicial que le añadirá más presión mediática, después de todas las informaciones de los últimos meses tras darse a conocer la polémica ruptura con Gerard Piqué.
Sin fecha para la vista oral
Ha sido la titular del juzgado de primera instancia e instrucción número 1 de Esplugues de Llobregat, Ana Duro, la encargada de determinar el juicio oral una vez que ha recibido los escritos tanto de las acusaciones --Fiscalía, Abogacía del Estado y Generalitat-- como de la defensa de la cantante, única acusada del caso. La jueza recuerda que contra esta decisión “no cabe recurso alguno”, por lo que el próximo movimiento será poner fecha a la vista oral. Se celebrará en la Audiencia de Barcelona, ya que los delitos superan los cinco años de cárcel.
La Fiscalía determina en el auto que los delitos de los que se acusa a Shakira son especialmente graves, debido a que la artista habría utilizado sociedades en paraísos fiscales para ocultar sus ingresos reales. Cierto es que existe una circunstancia atenuante que le permite rebajar la petición de la pena: reparación del año, después de haber depositado más de 17 millones en los juzgados.
Pacto necesario entre las partes
La Abogacía del Estado también ha presentado su escrito de acusación por tres delitos (los de IRPF), mientras que la Generalitat lo ha hecho por los otros tres delitos. En los últimos meses, después de que fracasaran las negociaciones entre el entorno de Shakira y el fisco español, la expareja de Piqué emitió un duro comunicado acusando a la Fiscalía de "intransigente" y de recurrir a “medios indebidos para presionar” en busca de sus objetivos.
Según defienden los poderes del Estado, en 2012, 2013 y 2014 Shakira pasó más de 183 días al año en España, lo que la convertía en residente fiscal. Las únicas estancias que Shakira pasó en el extranjero durante esos años fueron, en gran parte, para ejercer de jurado en el programa estadounidense “The Voice” (61 días en 2012, 118 en 2013 y 117 en 2014).
A pesar de la contundente acusación de la Fiscalía, la Abogacía del Estado y la Generalitat, será complicado ver entrar a Shakira en la cárcel. Para llegar a un acuerdo, deberá admitir el fraude y pasar por el banquillo de los acusados de la Audiencia de Barcelona. Será un mal trago corto, pero intenso. Sin lugar a dudas, el juicio del año en Barcelona.