Vuelta a los orígenes. Así es como está siendo el emotivo y distinto viaje de Memphis Depay, que está pasando parte de sus vacaciones en el país natal de su padre, Ghana, para visitar y ayudar a unos niños sordos a través de su fundación. También ha aprovechado para reunirse con el presidente, Nana Akufo-Addo, y para divertirse jugando unas pachangas con los chavales en campos de tierra.
Pachangas y bailes en las calles
Memphis ha viajado junto a su gran amigo, el también internacional holandés y ex sevillista Quincy Promes, después de haber disputado juntos los últimos partidos de la oranje en la UEFA Nations League. Ambos futbolistas se han dado un auténtico baño de masas por las calles de la capital, Accra, y antes de ello ya fueron recibidos en el aeropuerto entre vítores y aplausos, generando una gran expectación.
Memphis, de hecho, no dudó en participar en uno de los bailes del folklore tradicional ghanés, demostrando así que sigue muy ligado a sus raíces a pesar de vivir una realidad muy distinta a la del resto de sus compatriotas, con unos lujos inalcanzables para la mayor parte de la población.
Reunión con el presidente
Con el objetivo de mejorar la situación del país, el futbolista del FC Barcelona se reunió con el presidente y luego lanzó un post a través de las redes sociales: "Tuve el placer de sentarme con el presidente de Ghana y hablar sobre algunos temas hermosos, también estuvo presente el Ministro de Deportes y el Ministro de Educación. Hablamos sobre la Memphis Foundation y les dije que amo mucho al país. ¡Creo que el futuro de Ghana es brillante!", publicó Instagram, adjuntando la imagen de la visita junto al presidente Akufo-Addo.
Futuro lleno de incertidumbre
De la misma manera que el resto de internacionales que disputaron partidos de selecciones tras finalizar la Liga española, Memphis Depay deberá regresar a los entrenamientos con el FC Barcelona el próximo 11 de julio para empezar la pretemporada.
Eso, naturalmente, siempre y cuando no haya sido traspasado a otro equipo. Todavía no está descartado que el holandés, con el cartel de transferible, pueda servir al Barça para hacer caja y oxigenar aún más las arcas del Camp Nou. Su salida, eso sí, parece que irá ligada al fichaje de Robert Lewandowski. Y mientras el polaco no llegue, no se impulsará la marcha de un jugador con mucho talento... y también carisma.