Pedri ha concedido una extensa entrevista a la Cadena COPE, en las últimas horas, en la que ha hablado sobre diversas cuestiones de su vida personal y anécdotas varias, además de analizar también lo sucedido en el último clásico. El centrocampista de Tegueste está muy feliz por cómo le están yendo las cosas en el FC Barcelona, donde ha explotado definitivamente esta temporada 2021-22.
Se trata de una persona muy familiar, de orígenes humildes y que sabe valorar lo que tiene. Sobre todo, a quienes han estado a su lado y le han apoyado desde el principio. A sus 19 años, uno de sus grandes hobbies fuera de los terrenos de juego es jugar a la PlayStation. Al igual que otros compañeros de plantilla como Ousmane Dembelé, Pedri es un apasionado de los videojuegos y así lo ha dejado patente en la entrevista. Con su sueldo en el FC Barcelona, una de las primeras cosas que hizo fue comprarse la última versión de la consola. "Lo primero que compré fue la Play Station 5 cuando salió", reconoce.
Agradecido a su familia
A mayor escala, tiene pensado comprar una nueva casa a sus padres, quienes hasta ahora han gestionado su dinero. "Creo que eso lo llevan mis padres y también es de ellos. Ahora lo que quiero hacer es comprarle una casa a mis padres o a renovar la que tenemos", asegura el jugador del FC Barcelona ante las cámaras.
Los padres de Pedri son los dueños de un bar de carretera en Tenerife, y desde siempre le criaron en la cultura del esfuerzo. Su abuelo es un culé acérrimo, y podría decirse que la predilección que siente el joven jugador hacia el club azulgrana se dio gracias a él. No en vano fundó la peña barcelonista de Tenerife en 1994, después de aquellas ligas del Dream Team.
Cultura del esfuerzo
"De chiquitito me enseñaron que a base de trabajo se consigue todo y esto es lo que haré en el Barça", dijo Pedri cuando fue presentado con el FC Barcelona. Sus palabras podían entenderse como toda una declaraciones de intenciones, y así fue. El natural de Tegueste (una población de apenas 12.000 habitantes) siempre ha soñado con triunfar en el fútbol de élite, y el hecho de haberlo conseguido vistiendo la camiseta del Barça le llena de orgullo.
Tanto a él, como a su familia. Desde los 4 años, cuando empezó a jugar en los prebenjamines de Tegueste, Pedri ya sabía qué era tener que competir contra rivales mayores que él. Algo parecido le ha sucedido desde que está en el Barça, lo que le ha llevado a ganar musculatura para aguantar todos los minutos sobre el césped al máximo nivel y, además, a una gran intensidad. Pedri no se esconde si tiene que ir al choque, y tampoco se asusta ante las entradas de rivales mucho más corpulentos. Sabe que, con el talento que atesora en las botas, es capaz de conseguir lo que quiera en este deporte.