Es Navidad y todos estamos de celebración, incluidos los futbolistas, que esta primera parte de las fiestas han podido disfrutar de un merecido descanso para poder estar con los suyos. No obstante, la Nochevieja tendrán que pasarla en el país en el que trabajan. Será la primera Navidad de Messi en París. Pero hasta que eso llegue, estos días le hemos visto muy feliz en Rosario. El futbolista ha viajado hasta Argentina en compañía de sus hijos y su mujer, Antonella Roccuzzo, para pasar unos días al lado de los familiares de ambos.
Leo Messi además ha hecho turismo por la ciudad. Le hemos visto visitar muy orgulloso el mural que le han dibujado en uno de los edificios tras ganar la Copa América. Aunque le hemos vista una cara de cansancio y es que este fin de semana la fiesta no ha frenado. A pesar del aumento de contagios en todo el mundo por la variante Ómicron, el futbolista ha organizado una fiesta privada con familiares y amigos. Festejaron a pura cumbia santafesina con Los Palmeras en Rosario.
El motivo de esta fiesta no solo era celebrar la Navidad, también los últimos logros de Leo Messi. Su séptimo Balón de Oro, la Copa América en Brasil o su inicio con el PSG. La pulga disfrutó como nadie. Incluso entonó el famoso "Aeea yo soy Sabalero", ese que reventó Asunción, Paraguay, con la final de la Copa Sudamericana 2019 entre Colón e Independiente del Valle, y luego se subió al escenario para bailar con Antonela Roccuzzo, su mujer.
Muchos han criticado la fiesta de Leo Messi ya que podíamos ver a cientos de personas y todas ellas sin mascarilla en un sitio cerrado.