Malas noticias para Shakira tras estrenar con éxito su nuevo single, 'Don't Wait Up'. La sombra de Hacienda continúa sobre ella. La investigación por un delito de fraude fiscal está abierta y podría tener ya un veredicto. De momento sentar a la artista en el banquillo. Tras tres años de investigación, el juzgado de instrucción número 2 de Esplugues de Llobregat ha concluido que existen “indicios suficientes” para enviar a juicio a la cantante por el impago a Hacienda de 14,5 millones de euros.
Si no hay acuerdo entre ambas partes, Shakira tendría que testificar por seis delitos fiscales y podría terminar en la cárcel. En el auto al que ha tenido acceso la agencia Efe, el juez Marco Jesús Juberías considera que la artista, junto a los otros querellados, “emplearon una serie de sociedades mercantiles” para aparecer como titulares del patrimonio de Shakira, cuyo nombre sólo se encontraría “en último término y en sociedades radicadas en territorios considerados como paraíso fiscal”.
Así el juez aprueba la versión de la Fiscalía y corroborada por los técnicos de Hacienda, donde se rebatían los argumentos de la defensa de la cantante, que con su agenda televisiva y de conciertos demostraba que ha permanecido menos de 184 días en España y que, por tanto, no tiene ninguna obligación de tributar en España.
Se le acusa por no presentar las declaraciones de los años 2012, 2013 y 2014 y se le atribuye una deuda de 12,4 millones de euros por IRPF y de 2,19 millones por el impuesto del patrimonio. En el año 2010, Shakira conoció a Piqué y en 2011 ya viviría con él en Barcelona. Además, en 2013 dio a luz a su primer hijo, Milan, en la ciudad Condal.
Ella alegra que estableció su residencia en Barcelona en el año 2015. Año en que escolarizó a su hijo Milan. Hasta entonces, afirmó, había sido “una nómada sin raíces”.